GASTEIZ - Tradicional e históricamente, en los campeonatos de pelota hay que llegar a 22 tantos para ganar -salvo en las categorías inferiores, donde se juega también a 16 o a 18-. Sin embargo, el pasado domingo en el Ogueta, la pareja navarra formada por Peio Etxeberria y Jaunarena tuvo que lograr 23 puntos para llegar a la victoria.
Esta extraña situación se debió a que, cuando el partido iba 9-10, Peio sufrió una torsión de tobillo que le obligó a marcharse a vestuarios. Su compañero Jon, preocupado, también entró, pero sin permiso del juez. Por este motivo, y aplicando una norma del reglamento prevista desde 2016, el juez les restó un tanto.
“Si un pelotari abandona la cancha incumpliendo lo previsto en el artículo 9 -que habla sobre el abandono de la cancha sin permiso del juez-, le será quitado un tanto del marcador en ese momento (bien a él, bien a la pareja de la que forme parte), salvo que aún no hubiese obtenido ninguno”, reza la normativa de la LEP.M, que es la primera vez que se aplica.
Respecto a este tema Inaxio Errandonea, director deportivo de Aspe, informó que la decisión del Juez Único “se la hemos mandado a todos los pelotaris” con el objetivo de que no vuelva a ocurrir. “Lo que pasa históricamente es que con cualquier pequeño problema del pelotari se va a vestuarios, y eso es lo que se quiere cortar”, explica Errandonea. “La decisión no es a criterio del juez, es lo que pone en el reglamento, que está para aplicarlo” asume. - J.V.C.