IRUÑEA - Joseba Ezkurdia y José Javier Zabaleta sobrevivieron al caos. Su partido ante Iker Irribarria y David Merino tuvo de todo. Fases de buen juego alternadas con otras no tan buenas en los que los errores se sucedieron más de lo esperado. Aunque, a falta de brillo, sobró emoción. Las dos parejas fueron capaces de llevar el mando del partido, de verse con opciones de romper el choque y desperdiciar esas oportunidades. Todo eso llevó a un final de infarto. Ahí, el delantero de Arbizu fue el mejor. Defendió con entereza y provocó los errores de Irribarria para cerrar el encuentro con un 22-19 a su favor.

Aunque el primero en mandar fue el aramarra. Irribarria comenzó desatado. Buscó los remates a la mínima oportunidad y fue clave en el 0-4 inicial. Sin embargo, el encuentro del guipuzcoano fue una de cal y otra de arena. Como le ha pasado en más de una ocasión, otra vez alternó grandes momentos con demasiados errores. Su ambición es tremenda y si a veces le acompaña en el éxito, otras le entorpece. Fueron demasiados errores los acumulados y eso permitió a los colorados, sin hacer un gran partido, mantenerse con vida hasta el final. Con el partido a cara o cruz, tres errores consecutivos de los azules, fomentados gracias al gran trabajo de Ezkurdia y Zabaleta, hicieron que el partido acabara con el marcador de 22-19. - J. Victoria de Lecea