la paz - El Dakar llegó ayer por primera vez al Titicaca, el lago navegable más alto del mundo, con 3.800 metros sobre el nivel del mar, desde donde pasará de Perú a Bolivia para abrir cinco días de altura y frío por el altiplano boliviano. La sexta etapa partió a primera hora de la sureña ciudad peruana de Arequipa y llegará a La Paz, tras un recorrido de 760 kilómetros, de los que 313 serán cronometrados y 447 de enlace. Las motos no hicieron el primer tramo cronometrado del día, de 113 kilómetros, suspendido por la organización ante la acumulación de niebla en la zona, y su jornada de competición comenzó en el segundo tramo, cuya partida se produjo a orillas del lago Titicaca.

Tras dejar atrás el desierto de Perú, donde se desarrollaron las cinco primeras etapas, los competidores correrán ahora por pistas y caminos de tierra, donde la velocidad marcará las diferencias.

Al terminar la jornada en La Paz, el Dakar se tomará un respiro para aclimatarse a la altura y hoy mismo tendrá su jornada de descanso antes de enfilar la segunda parte del rally, compuesto de ocho días ininterrumpidos de competición por Bolivia y Argentina hasta llegar el sábado 20 a la meta situada en Córdoba. Los pilotos tratarán de llegar lo más enteros posibles a la capital boliviana para seguir con opciones de luchar por el triunfo en el rally durante los próximos días.

MOTOS El argentino Kevin Benavides (Honda) se convirtió ayer en el nuevo líder del Dakar en motos al finalizar en segunda posición la sexta etapa del rally, entre la ciudad peruana de Arequipa y La Paz, cuyo ganador fue el francés Antoine Meo (KTM). Benavides, primer argentino que lidera el rally en toda su historia, completó los 196 kilómetros cronometrados de la etapa a 30 segundos de Meo, y cerca de tres minutos por delante del francés Adrien Van Beveren (Yamaha), al que desbancó de la primera plaza de la clasificación general.

Por su parte, el español Joan Barreda (Honda) hizo tres segundos más que Van Beveren y se quedó a tres minutos de Benavides, por lo que ahora está a 9 minutos y 33 segundos del liderato del rally.

primeras víctimas El español Joan Nani Roma (Mini) y los franceses Sébastien Loeb y Cyril Despres (Peugeot) están entre los más de 60 competidores que se quedaron sin opciones de ganar el Dakar más duro de los últimos tiempos en su primer tercio de carrera, transcurrido íntegramente en el desierto de Perú. Las complicadas dunas de arena blanda y fina eran el primer desafío para los participantes de la cuadragésima edición del Dakar, que se anticipaba particularmente complicada y exigente, y las numerosas bajas de pilotos ampliamente experimentados así lo está demostrando. “Está lleno de trampas”, dijo Despres, cinco veces ganador del Dakar en moto, justo el día antes de chocar en la cuarta etapa con una piedra y destrozar la rueda trasera de su coche, lo que le quitó cualquier posibilidad de luchar por el rally cuando estaba en la segunda posición de la general. El francés, que continúa en carrera a muchas horas de distancia de la cabeza, hizo esa reflexión para explicar el accidente que en la tercera etapa tuvo Nani Roma, doble campeón del Dakar. - Efe