buenos aires - Las Boquitas, las animadoras de Boca Juniors, fueron despedidas porque, según el club, “cosifican a las mujeres”. Sin embargo, las bailarinas y las agrupaciones feministas opinan que su desplazamiento es contraproducente en la lucha contra el machismo.

“Consideran que Las Boquitas cosifican a la mujer, así que nos duele este motivo porque lo que menos hicimos fue cosificar y lo que más queremos es defender a la mujer y que se respete el Ni una menos”, asegura Rocío Martín, productora de Las Boquitas. “La verdad que nos sorprendió la noticia, fue inesperado para nosotros. El motivo fue por esta cuestión de que se quiere hacer una campaña muy fuerte del Ni una menos”, añade.

Ni una menos es un grito colectivo contra la violencia machista surgido para “decir basta” a los feminicidios, porque en Argentina cada treinta horas asesinan a una mujer sólo por ser mujer.

El club decidió, a comienzos de este mes, apartar a las bailarinas y acróbatas que animaban los entretiempos de los partidos de fútbol, baloncesto, fútbol sala y voleibol, entre otros deportes. La productora contó que Las Boquitas colaboraban con la Fundación Boca Social y que trabajaban con chicos que tienen problemas de adicción para ayudarlos y transmitirles que el deporte es una herramienta para salir de las drogas.

niegan la cosificación “Todas las chicas y los chicos que tuvimos elegían estar ahí porque su sueño era poder mostrar lo que hacían, su pasión, que es el arte, la danza, el deporte, la acrobacia o la gimnasia, nada menos que en la Bombonera. Estábamos lejos de cosificar, lejos”, añadió la productora.

Con ella coincide la abogada Sabrina Cartabia, investigadora asociada del Programa de abogacía feminista de la Universidad Torcuato Di Tella e integrante de la Asociación Civil Red de Mujeres y del colectivo Ni una menos. “Para nosotras no hay una relación directa entre proteger los derechos de las mujeres y echar a las chicas o desplazarlas de su lugar de trabajo. De hecho, nos parece que todo lo contrario. Si Boca tenía un interés en trabajar con este tema tendría que haberlo hecho con las mujeres en lugar apartarlas”, señala Cartabia.

Anabella Crosetti, miembro de Las Boquitas y exintegrante del seleccionado argentino de gimnasia rítmica, asegura que ellas buscan dar otra imagen. “Intentamos promover una vida más saludable y el entrenamiento. Todas tenemos una carrera, somos profesionales, gimnastas, bailarinas, acróbatas. Nada que ver con lo que es cosificar a la mujer”, sostiene.

Por su parte Naiara Gaitán, bailarina de Las Boquitas, asegura que los hinchas suelen tratarlas con respeto. “Siempre después de trabajar nos quedamos a ver el partido y la gente se acerca, nos piden fotos, nos sacamos fotos con los hijos, las nenas, con la familia. No se acercan hombres nada más por las fotos, sino también niños, niñas, mujeres, y familias”, explica, confiando en que el club rectifique.