La hora de la verdad

Saques: 2 de Ezkurdia (tantos 1 y 6) y 6 de Altuna III (tantos 9, 11, 12, 13, 15 y 16).

Faltas de saque: Ninguna.

Pelotazos: 250 pelotazos en juego.

Tantos en juego: 6 de Ezkurdia y 13 de Altuna III.

Errores: 3 de Ezkurdia y 4 de Altuna III.

Pasa del Cuatro y Medio: 1 de Altuna III.

Marcador: 1-0, 4-1, 5-1, 6-2, 6-6, 7-13, 9-14, 10-16, 13-17 y 13-22

Botilleros: Ejercieron de botilleros Juan Martínez de Irujo (con Joseba Ezkurdia) y Ekaitz Saralegi (con Jokin Altuna).

Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada de la liguilla de cuartos de final del Grupo B del Cuatro y Medio de Primera de la LEP.M disputado en el frontón Beotibar de Tolosa. Buena entrada.

tolosa - Jokin Altuna alcanzó ayer las semifinales del Cuatro y Medio de Primera por la puerta grande, después de tumbar a Joseba Ezkurdia, desnortado, sin rumbo. El delantero de Amezketa superó al de Arbizu de cabo a rabo. Le sirvió su mejor pose en la cancha y un olfato que no se le va nunca. El manista guipuzcoano es un artista que sorprende, pero que maneja cada uno de los palmos del frontón con maestría. Sabe qué tiene que hacer. Y eso, se tiene o no se tiene. Viene impresa en el ADN. Viene en las tardes de bocadillo en las gradas del frontón Larrunari de Amezketa viendo cómo los mayores se batían el cobre. Viene de las horas de lectura de los detalles. Al de Sakana se le vieron las costuras en esa cuestión, pues no supo aprovechar las ventajas que le da un físico privilegiado. Tres principios se destacan del Cuatro y Medio: el saque -o resto en su defecto-, la velocidad y la amplitud de la cancha. Joseba no supo cumplir ninguno de ellos. Además, se vino abajo tras una falla inicial (6-1) en la que Altuna notó el peso de la responsabilidad. En el primer tembleque de piernas, en ese instante de duda, el olor a sangre no estimuló el paladar de Joseba. Acabó trasquilado. El de Sakana se vio superado de un tirón. Tanto que quedó noqueado y visto para sentencia. No supo darle la vuelta. El resto fue una tortura y en el peloteo, quitando en tantos contados, estuvo poco resolutivo, sin brújula ni guion. A la hora de la verdad, Jokin mostró el tuétano. Está lleno de pelota.

Y es que, el guipuzcoano, pelotari de acción, rezuma inteligencia por los poros y, además, sensación de entereza. Sobrevivió al inicio de Iñaki Artola. Sobrevivió ayer ante el inicio de Ezkurdia. Siempre saca un conejo de la chistera o un as de la manga. En el Astelena, contra el alegiarra, se puso a mandar en el peloteo. Cara. En el Beotibar, ante el voleísta, triunfó con el saque -seis quedaron sin restar- y se irguió en las esquinas. Cara. Otro truco: una moneda sin cruces. Joseba hizo aguas.

Con todo, el inicio de Jokin fue a contracorriente. Ezkurdia quiso meter velocidad y se encontró con un buen saque, un voleón y un par de yerros de su contrincante. El 4-1 fue un toma y daca de 30 pelotazos que terminó Jokin, inmenso, con un dos paredes para enmarcar, pero un yerro y otro saque le hicieron verse 6-1.

Fue el límite. Un gancho cambió la iniciativa y el saque transformó el partido en un potro de tortura para Ezkurdia. Jokin sacó el catálogo de remates: una parada al txoko, otro dos paredes, un gancho? Después del 6-5, tres saque-remates, tres ganchos, y un saque rompieron el partido (6-9). Tal fue el vaivén para el arbizuarra que, con todo para terminar, en la siguiente oportunidad su remate besó chapa. Al perro flaco? Otros tres saques destrozaron al navarro. Tras el 6-13 no hubo historia. Tres saques más cercenaron a Ezkurdia, que no se repuso aunque se acercó 13-16.