bilbao - La Vuelta al País Vasco de 2018 tiene prácticamente cerrado su recorrido a la espera de unos pequeños flecos que se ultimarán en los próximos días. Tal y como ha podido saber este periódico, la prueba partirá desde Zarautz el próximo 2 de abril y finalizará en Eibar el día 7 de ese mismo mes tras recorrer distintos pueblos de Bizkaia, Araba y Nafarroa. Igual que sucediera el año pasado, la carrera, que sigue encuadrada en la élite del ciclismo mundial dentro del WorldTour, no atravesará las carreteras de Iparralde, por donde sí transcurrirá el Tour de Francia del próximo año. Después de que la localidad de Orio se retirara de la puja por albergar la salida, finalmente la Itzulia saldrá de Zarautz, donde concluirá también la primera etapa.

Bizkaia cobrará protagonismo el martes 3 de abril, cuando albergue la llegada de la segunda jornada en una localidad aún por determinar, aunque Markina cuenta con papeletas para repetir.

La prueba unirá Bizkaia y Araba en su tercer día de competición, que concluirá en la Cuadrilla de Añana en una localidad aún por concretar. El valor turístico de las Salinas de Añana, reclamo en diversas campañas institucionales del Gobierno Vasco, es el motivo por el que la Diputación de Araba se ha decantado por esa la meta de esa tercera jornada. El año pasado, la Vuelta al País Vasco concluyó en Eltziego, frente a la conocida bodega de Marqués del Riscal.

Pero sin duda alguna, la principal novedad de la próxima edición de la Itzulia será el adelanto de la prueba contra el crono, que en lugar de en la sexta y última jornada se celebrará en la cuarta etapa, con salida y final en Lodosa. Desde la localidad navarra han ideado un bonito recorrido de unos 18 kilómetros con varios tramos de falsos llanos que marcará diferencias entre los principales favoritos para hacerse con la victoria.

La Itzulia, tal y como ha sucedido en las dos últimas ediciones, concluirá en Eibar. La localidad armera será una vez más protagonista de la prueba, que contará con un nuevo final de etapa en Arrate. Igual que en 2016, una de las ascensiones al santuario se realizará a través de Matsaria, con rampas que alcanzan casi el 15% por de desnivel. - A. Martínez