vitoria - La Euroliga celebra hoy en Barcelona una de las Asambleas más importantes de los últimos tiempos. Encima de la mesa de los dirigentes de los dieciséis mejores equipos europeos estarán dos asuntos espinosos como la posible ampliación de participantes de cara a la temporada 2018-19 -el medio italiano Tuttosport publicó ayer que la idea es abrir la competición a 18 conjuntos con la inclusión del Bayern Munich alemán y el campeón francés antes de la ampliación definitiva a 24 dentro de dos años- y la respuesta a la última solución planteada por la FIBA para tratar de resolver la coincidencia de partidos de Euroliga y de las ventanas para la disputa de clasificatorios de la selecciones nacionales. La máxima competición continental analizará hoy la sugerencia de pasar al martes dos de sus jornadas previstas para jueves y viernes.

Días atrás, la Euroliga puso varios peros al proyecto del máximo organismo de la canasta. No en vano, se entiende que “la propuesta de la FIBA no resuelve el asunto principal, que es la ausencia de los mejores jugadores durante la mayoría de las ventanas”. Con ello se refiere a la presencia de los baloncestistas de la NBA, que en noviembre y febrero no podrán competir con sus selecciones.

La propuesta de la FIBA pone un extra de presión sobre los jugadores, pues requeriría tomar parte en numerosos partidos en un reducido periodo de tiempo sin descanso y con largos viajes entre medias. Sin ir más lejos, algunos de los desplazamientos que los jugadores deben afrontar alcanzarían las 50 horas en caso de tenerse que desplazarse a Sudamérica. Los baskonistas Luca Vildoza y Patricio Garino, que serían convocados por Argentina, y Jayson Granger, un fijo de Uruguay, estarían entre los afectados y se verían sometidos a un desgaste sobrehumano.

En cualquier caso, la Euroliga celebra que la FIBA haya realizado alguna propuesta y muestra su voluntad de seguir negociando en busca de una solución. Hoy, podría ser el día para la fumata blanca. - DNA