nueva york- En 2003 Rafa Nadal jugó su primer partido en el cuadro final del US Open ante Fernando Vicente. Ayer disputó los cuartos de final contra el pupilo del extenista levantimno, ese Andrei Rublev que había llegado hasta esa ronda con la insolencia de sus 19 años y mucho talento en su raqueta. Pues bien, al ruso le tocó sufrir uno de esos partidos que han hecho que idolatre a Nadal, con el que, además, comparte licencia en el Club de Tenis Barcelona.
El de Manacor martirizó a Rublev, al que dedicó una lección de hora y media que cerró con 6-1, 6-2 y 6-2. que deja clara la superioridad de Nadal desde el comienzo. En el primer duelo entre ambos, el chaval ruso salió con la intención de pegar muy duro, pero la pelota le volvía más fuerte aún y ahí se quedó sin respuesta para tratar, al menos, de alargar el partido.
Nadal jugará mañana ante el ganador del Federer-Del Potro que se disputó en la madrugada de ayer y por el otro lado, Pablo Carreño buscará su primera final de Grand Slam ante Kevin Anderson. Es la primera vez en la historia que dos tenistas españoles llegan a las semifinales del US Open.
En el cuadro femenino, el triunfo de Vandeweghe ante Pliskova, al margen de suponer el número 1 para Muguruza, hizo soñar al público local con un pleno de estadounidenses en semifinales, algo que no ocurre desde 1985 cuando jugaron esta ronda Martina Navratilova, Zina Garrison, Chris Evert y Kathy Rinaldi. La ganadora de ayer se medirá a la que salga del Keys-Kanepi y la otra semifinal será Sloane Stephens contra la eterna Venus Williams, que juega con 37 años sus terceras semifinales de Grand Slam este año. - R. Calvo
