Le Puy En Velay - Landa, que está feliz porque las piernas le sonríen y no hace caso a los señuelos que le lanzan desde equipos rivales para dinamitar el suyo, continúa su imparable crecimiento en el Tour de Francia, una carrera que no tenía hueco en su agenda, pero que, paradójicamente, ha subrayado su nombre como ningún otro las agendas de todos los equipos poderosos del pelotón. En plena carrera, el alavés está recibiendo ofertas por el tremendo impacto que está generando su actuación en el Tour. En las últimas horas ha asomado algún equipo con ganas de atar al alavés por el estruendo que está produciedo en Francia. Las ofertas continúan llamando a su puerta, si bien Mikel Landa tiene claro que su apuesta será la que más garantías deportivas le ofrezca. Movistar parte con clara ventaja en la carrera por hacerse con los servicios del alavés que está siendo agasajado por el Sky. El problema con la escuadra británica no parte de este Tour, si no del Giro, cuando le promieron la capitanía que luego tuvo que compartir con Geraint Thomas. Ese detalle quedó clavado en Landa, que asume su rol en el Tour.

Landa tiene claro su destino en un 99%. Su deseo es seguir creciendo como ciclista y eso supone disponer de la libertad y confianza que se otorgan con ojos cerrados a los jefes de fila. De hecho, Landa, que posee un caché considerable, solamente asumible por las escuadras más poderosas, prioriza lo deportivo a lo económico. En los dos años que firmará quiere demostrar que es capaz de ganar una grande. Su objetivo es el Giro, la carrera que más le estimula, pero una vez comprobada su explosión en el Tour, donde es sexto a 1xx de su compañero Froome a falta de suna semana, ha despertado el interés de más escuadras que lo quieren como líder para la próxima campaña. Mientras la carrera desncasa hoy, la puja por Landa continúa rodando.