Duración: 48 minutos de juego.
Saques: 1 de Olaizola II y 1 de Altuna III
Pelotazos: 424 pelotazos en juego.
Tantos en juego: 13 de Olaizola II y 5 de Altuna III.
Errores: 1 de Olaizola II, 3 de Albisu, 2 de Altuna III y 6 de Zabaleta.
Marcador: 11-0, 12-6, 12-7, 13-8, 17-9, 18-10 y 22-10..
Incidencias: Partido correspondiente al grupo B de la liguilla de semifinales de la feria de San Fermín de la LEP.M disputado en el frontón Labrit de Iruñea. Lleno. En el primer partido, Bakaikoa-Salaverri superaron a Elordi-Merino (10-18); mientras que, en el telonero, Unai Laso y Ladis Galarza doblegaron a Mendizabal III-Erostarbe (9-18).
IRUÑEA- Aimar Olaizola, recientemente coronado como el mejor del Cuatro y Medio de San Fermín, y Jon Ander Albisu abrieron la noche del lunes su participación en la feria de Iruñea tal y como lo hicieron el curso pasado: en formato rodillo. El delantero de Goizueta se vio bien acompañado por el pegador ataundarra, que sacó a relucir una versión segura y dominadora para formar un dueto de contundencia. El navarro ejerció de juez desde los cuadros alegres, aprovechando el viento a favor, y el guipuzcoano empoderó su mano convirtiéndose en el mazo de las sentencias. Jokin Altuna y José Javier Zabaleta, desdibujado, naufragaron en el Labrit de Iruñea y se despedirán de la competición de duetos que abre el verano con sensaciones amargas, ya que acumularon dos derrotas en sendos partidos de la liguilla de semifinales.
Las figuras de Olaizola II y Albisu se transformaron en gigantes en la nocturna iruindarra, dominando cada palmo del tapete. El zaguero asumió el rol de mando de la contienda y el veterano navarro sumó de inicio un tramo para quitarse el sombrero. Si bien el resultado final del choque marca un 22-10, el bloque colorado, los campeones en curso, se dieron un festín antes de que se despeinara el compromiso: 11-0. Los de Asegarce arribaron a mitad de tajo merced a los problemas de Zabaleta para imponerse en la refriega de los cuadros largos. Y en tal medida, el luminoso se derramó hasta dejar el choque sentenciado sin llegar a la docena. En 153 pelotazos se echó el freno al choque y a los de Aspe, que acusaron el cansancio del traqueteo. No en vano, el delantero de Amezketa suma tres partidos en cuatro días, siendo la final del Cuatro y Medio de San Fermín del viernes un potro de tortura.
De cualquier modo, incómodos en un primer tramo, con una desventaja clara, en la pelea a contracorriente tocó tirar de cuajo. El pellejo azul, dañado por la tacada, se fue restañando a medida de que entraron en juego. Poco a poco. Maquillaje. Fueron seis tantos de autoexigencia, de marcar un poco de terreno, de tratar recomponer las esquirlas del choque. No se recuperó la emoción ni así. Aimar sacó la zurda y marcó un gancho ajustado que les llevó al primer descanso largo y partió la reacción de la combinación de Aspe.
Un error del goizuetarra devolvió cierta dosis de fe en la revancha. Y Altuna III-Zabaleta apuraron hasta el 12-8. Después, la maquinaria colorada afinó prestaciones y quiso recuperar la perfección de sus primeros compases. El primer cimiento lo puso el zaguero de Etxarren, que besó el colchón de arriba y anduvo gris. El segundo, dos remates del navarro. Albisu le abrió la senda.
Con el 17-8 en el luminoso, el amezketarra y el pegador de Sakana se revolvieron con dos cartones más en su cuenta particular, pero no fueron más que estertores. El partido volvió a quedar dominado por un gancho parido por Aimar, que se fue el segundo parón largo y no dejó más opción a los jóvenes de Aspe. Jokin lo intentó, pero tiró el remate. Olaizola noqueó con otro gancho. Y Albisu, mandón y castigador, se llevó una actuación de pantalón largo a casa. El 22-10 nació de la gran combinación que se desplegó sobre el tapete del Labrit. Demasiado. Albisu ejerció de guía; Aimar, impenitente, no tuvo piedad. Un arranque de lujo y miedo.