madrid -Ángel María Villar, al frente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) desde 1988 en sustitución de José Luis Roca, afrontará el próximo lunes su octavo mandato al frente del máximo organismo del fútbol español, porque es el único candidato al cargo, a la espera de cómo se resuelva el litigio planteado por el que era su único rival, Jorge Peréz, su antiguo secretario general, que se retiró de la carrera a la presidencia tras pedir la nulidad de las elecciones a la asamblea general y la repetición de todo el proceso.
La continuidad de Villar, al menos de momento, es consecuencia del acuerdo al que llegó ayer el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD)de posponer a una próxima reunión la resolución del recurso de Jorge Pérez, en el que pide la paralización de las elecciones a la presidencia de la RFEF.
El TAD argumenta que “se encuentran pendientes de resolución” en este tribunal “determinados recursos, unos porque la Comisión Electoral no ha remitido todavía la documentación y su informe y otros porque esa documentación, particularmente voluminosa, ha llegado en la mañana de hoy (por ayer)”.
El TAD añadió a través de un frío comunicado que “deliberará sobre estos asuntos en una próxima reunión, adoptando en ese momento las decisiones que procedan”.
El tribunal no tiene previsto reunirse de nuevo antes del próximo lunes, que es cuando está programada la Asamblea General de la RFEF para la elección del presidente y la Comisión Delegada. En consecuencia, Ángel María Villar, como único candidato a esas elecciones, será reelegido para un octavo mandato consecutivo, el sexto sin contrincante.
Hace siete días el TAD desestimó la adopción de medidas cautelares pedidas por Jorge Pérez, único aspirante opositor a Villar, por no apreciar la urgencia necesaria para suspender el proceso electoral, pero ante las denuncias de posibles irregularidades hechas por este solicitó a la Comisión Electoral que le enviase documentación relativa al caso de forma urgente.
Esta postura del tribunal hizo que Jorge Pérez, secretario general de la RFEF desde 2003 hasta octubre de 2016, acudiese a la vía contencioso administrativa y solicitara, también sin éxito, medidas cautelarísismas en el mismo sentido.
“La prosecución del proceso electoral, incluso su finalización, no supondría un impedimento para la estimación de la nulidad del proceso en caso de acreditarse la concurrencia de cual quiera de las causas previstas legalmente en los recursos que se instaran al efecto lo que generaría los efectos inherentes a la declaración de nulidad en su caso”, señaló la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid el pasado día 17.
las denuncias Tras la proclamación definitiva de los miembros de la Asamblea por parte de la Comisión Electoral, Jorge Pérez anunció la presentación de su recurso por irregularidades detectadas principalmente en el voto por correo y pidió la nulidad con medidas cautelares del proceso y la repetición del mismo, pero tutelado por el Consejo Superior de Deportes (CSD), al menos en lo relativo al voto no presencial.
Pérez denunció “irregularidades flagrantes” y entre ellas aseguró que faltan 973 votos depositados en notaría cuyo paradero se desconoce, lo que supone la desaparición de un 20% de los votos, así como al escrutinio de más de 500 votos irregulares incorporados al proceso y el recuento de votos llegados fuera de Plazo.
Por estos motivos Pérez no entregó los avales requeridos para ser proclamado candidato, (“no sería coherente pedir avales a una asamblea que no reconozco”, dijo), y la Comisión Electoral proclamó el 11 de mayo a Villar como único candidato.