Real Madrid75
Fenerbahce84
REAL MADRID Llull (28), Doncic (-), Maciulis (-), Randolph (7) y Ayón (2) --cinco inicial--; Carroll (21), Taylor (3), Rudy Fernández (-), Hunter (6), Draper (-) y Thompkins (8).
FENERBAHCE Dixon (9), Bogdanovic (14), Kalinic (12), Udoh (18) y Vesely (12) --cinco inicial--; Sloukas (9), Datome (8) y Nunnally (2).
Parciales 21-13; 23-21; 19-16; 21-25.
Árbitros Lamonica, Ryzhyk y Latisevs.
Pabellón Sinan Erdem Arena.
estambul - El Real Madrid vio truncado su asalto a la décima corona europea al caer (84-75) ayer en la semifinal de la Final Four de la Euroliga ante el Fenerbahce, un choque en el que los de Pablo Laso estuvieron lejos de su mejor versión, anulados por un cuadro turco dispuesto a triunfar en casa bajo la tutela de Zeljko Obradovic.
El veterano y laureado técnico serbio volvió a ser el verdugo del equipo blanco, después de la eliminación el año pasado en cuartos de final. El equipo turco, bajo el empuje unánime del Sinan Erdem Dome, se comió a un Madrid sustentado sólo por Sergio Llull en la primera mitad (autor de 19 tantos) y después con Jaycee Carroll.
El artillero americano dio algo de vida al Madrid en el tercer cuarto (52-46), pero un enchufado Fenerbahce no vaciló en responder a las amenazas del nueve veces campeón de Europa. Los turcos dominaron en la pintura con Ekpe Udoh (18 puntos) y Jan Vesely, contaron con el liderazgo de Bogdan Bogdanovic y un inspirado Nikola Kalinic, sobre todo tras el descanso, y llevaron la voz cantante para citarse con Olympiacos en la final del domingo.
El Madrid echó de menos a muchas de sus armas. El equipo de Laso, que a lo largo de la temporada ha demostrado su fondo de armario, estuvo siempre sin argumentos más allá de Llull y Carroll para hacer frente al torbellino del anfitrión. No encontró al debutante en estas lides Luka Doncic ni encontró respuestas a la férrea posición del rival. Al rescate fue Llull en el primer cuarto (11 puntos), mientras en el Fenerbahce todo funcionaba a la perfección (21-13). Con los de Obradovic lanzados, llegó el primer conato de reacción de los de Pablo Laso.
El rifirrafe entre Datome y Rudy Fernández encendió al cuadro español y despistó al turco. El Madrid mejoró en defensa y encontró tres triples seguidos con un parcial de 0-11 (26-21). Bogdanovic asumió el mismo rol que Llull en el equipo rival y junto con Vesely volvieron a poner tierra de por medio mientras Randolph se retorcía en el suelo de la otra canasta (35-27). Carroll comenzó su aportación antes del descanso para maquillar una mala primera mitad (44-34).
Sin juego interior, sin rebote, el Madrid sufría muchos frentes abiertos, con la duda del estado físico de Randolph, quien pese a los signos de dolor en el costado volvió a pista en la reanudación. A esos frentes se les sumó el de Kalinic, haciendo estragos con sus robos a un Madrid que acumulaba pérdidas sin remedio (52-37) hasta la irrupción desde el triple de Carroll, con tres seguidos.
con vida El Madrid encontró desde la línea de tres la vida necesaria para llegar a los últimos cinco minutos con vida (70-62) después de ir 16 puntos abajo. Hunter respondió a la necesidad madridista de encontrar respuestas en el banquillo mientras el acierto de Carroll se apagaba. No ocurrió lo mismo con Udoh y Vesely, quienes amarraron la segunda final consecutiva de Fenerbahce (77-64).
Después de mandar en el Viejo Continente en la fase regular, el Madrid no tuvo su día en Estambul. Fenerbahce fue quien se vengó, de la derrota en semifinales hace dos años, para buscar un primer título que se le resiste. El maestro Obradovic pudo con el discípulo Pablo Laso en su decimosexta Final Four y en búsqueda de su noveno título, con el séptimo equipo distinto. - E.P.