Existen pocos elementos cualitativa y cuantitativamente tan relevantes, pero a la vez tan diminutos, como los puntos. Un punto, una mierdecilla de punto, te puede salvar tu lastimera vidilla cuando lleva el apellido “de sutura”. Tenemos puntos y seguido, punto y aparte, punto final, dos puntos, puntos suspensivos, poner los puntos sobre las íes, hacemos ganchillo y punto, hacemos punto y ganchillo, hacemos punto de cruz, la Dirección General de Tráfico nos quita puntos siempre de manera injusta, hay chaquetas de punto, existe el Fiat Punto, se está en el punto de mira, se juega un punto de break, después un punto de partido, cuando alguien nos atrae decimos que tiene un punto, hay puntos de locura, puntos del índice Dow Jones, puntos del Nikkei, puntos del Ibex para los que tienen telita, existen puntos o apostantes en los frontones, puntos en los partidos de baloncesto, puntos de la Travel, puntos de la Fórmula Uno, del Mundial de Motociclismo? También existen unos puntos muy graciosos. Son los de Eurovisión. Tras la vibrante y espectacular actuación del sábado a cargo del gallo Manel Navarro, España acumula 5 puntos, que podrán ser canjeados en el Eroski más cercano por una bolsa pequeña de magdalenas de marca blanca. Una pena que no lograra seis, porque se habría ganado el derecho a una lata de refresco de cola 0% azúcar para guardar la línea. Y encima la broma nos ha salido carita porque la pagamos entre todos. ¡Qué puntazo! Puntos aparte, los que más nos interesan a todos los futboleros son los puntos de la Liga. Algunos afortunados andábamos aún con las chanclas, una noche dominical de agosto, cuando el Glorioso comenzó a sumar puntos. Fue Manu García, en el descuento, el artífice del primer puntito en el Calderón. En 9 días estaremos ahí de nuevo, en una final punto y aparte. Inicio de campaña y final de campaña. Mismo escenario. ¿Casualidad? No creo en ellas. Mi religión me lo prohíbe. Quien más, quien menos podía pensar que por aquel entonces faltaba un punto menos para llegar a los 40, no los ladrones -que son más-, ni los Principales, sino los que teóricamente concedían la salvación. Pues no. Esta temporada ha resultado de rebajas, ya que en 33 puntos, diga 33, se sitúa la permanencia. Y el Deportivo Alavés sobrevuela la zona alta de la clasificación con 54 puntazos. Alucinante. Despampanante. Llega a durar la competición 8 meses más y pillamos a Cristiano y compañía? Y los puntos que se nos han quedado en el camino de la desesperación en la primera vuelta? Nos encontramos en una proyección real de 57 puntos, con opciones de quedar octavos -mejor que Fernando Alonso en todo el Mundial-, siendo conscientes de que si descalifican a los siete primeros por la trama Púnica somos campeones de Liga? Y hay que comprar un autobús descapotable de dos pisos para ofrecer el trofeo a la ciudad, y dos gabarras para navegar por el Zadorra, y ofrecer el título a la Virgen Blanca, a la de Estibaliz y a alguna que se apunte a última hora? Soñar no cuesta nada ni malgasta puntos. Igual son puntos a estudiar, puntos de referencia, puntos de análisis? Podríamos guardar en un frigorífico los puntos que nos sobran para la próxima campaña, para cuando lleguen las vacas flacas o los terneros gordos. 54 puntazos? El domingo llegó el punto de ebullición con el último encuentro en Mendizorrotza. Y el Deportivo Alavés demostró estar un punto por encima de un deprimido Celta. O más de uno. La primera parte fue punto y aparte. Sin alcanzar aún el punto de fricción del encuentro, el punto culminante llegó de la mano/del pie de Manu García. Punto de locura en los graderíos. Punto 2: Feddal se apunta a los puntos. Punto 3: Deyverson, que sigue repartiendo besos por el mundo, pone el punto y final al partido. Tres nuevos puntos en el zurrón albiazul. El equipo, a punto para soñar con la Copa. Los jugadores, al punto. La afición, de nuevo 100 puntos. Punto y final para la temporada en Mendizorrotza. ¡Vaya puntazo! PD: la próxima semana les presentaré la guía básica de los jóvenes castores alavesistas de cara a la final copera del Calderón. Será todo un punto de referencia.
segundos y a por todas Que si terceros, que si cuartos? Mira tú que el Valencia sestea en el peor momento, el Baskonia hace los deberes y nos colamos en la segunda posición. Pues tiene buena pinta la cosa, con unos cruces en los que debemos partir como favoritos. Lástima de las lesiones. Eso sí, igual aparece el nuevo fichaje, Ricky Ledo, y las enchufa de todos los colores. Tiene más nombre de disc-jockey de la Penélope de Benidorm que de jugador pero vete tú a saber?