Panathinaikos75 - Fenerbahce80

PANATHINAIKOS Calathes (4), Rivers (8), Pappas (5), Singleton (14), Bourousis (13) -quinteto inicial-, Nichols, James (22), Fotsis (3), Feldeine y Gist (6).

FENERBAHCE Sloukas (5), Bogdanovic (25), Datome (2), Vesely (2), Kalinic (7) -quinteto inicial-, Udoh (22), Antic (3) y Dixon (14).

Parciales 20-22, 23-23, 16-18 y 16-17.

Árbitros Pukl, Latisevs y Jiménez. Sin eliminados.

Pabellón OAKA. 18.310 espectadores.

Vitoria - No es casualidad ni mucho menos que Zeljko Obradovic sea considerado el monarca indiscutible de los banquillos. Su excelso currículo no admite comparación alguna y desde ayer puede presumir de contar con un nuevo récord en su palmarés. Y es que el Fenerbahce que dirige desde hace varias temporadas se convirtió en el primer equipo en toda la historia de la Euroliga en conseguir dos victorias a domicilio consecutivas en los dos primeros encuentros del play off. Nunca nadie lo había hecho antes y tuvo que ser el mago de Cacak el que lo hiciera nada menos que en el infierno del OAKA ateniense y ante el equipo en el que conquistó la mayoría de sus títulos y con el que aún mantiene una relación muy especial.

Sin embargo, el preparador balcánico no entiende de amistades cuando se sitúa en la banda de una cancha de baloncesto y anoche asestó una puñalada que se antoja a todas luces definitiva al Panathinaikos de los exbaskonistas Mike James y Bourousis. Si el primer duelo de la serie fue una montaña rusa con grandes alternancias en el marcador a favor de ambos equipos, ayer la igualdad máxima fue la nota predominante.

Un triple fallado por Rivers y una pérdida de balón de Bourousis a falta de 17 segundos con 75-78 en el luminoso y tras dos tiros libres anotados por Bobby Dixon determinaron la suerte final del choque. - T.S.