SHANGHÁI - El piloto español Fernando Alonso (McLaren) está preparado para otro fin de semana difícil en el Gran Premio de China, segunda cita del Mundial de Fórmula 1 a la que Mercedes llega deseoso de abortar la reacción de Ferrari, que dio el primer golpe del año al ganar en Australia a través de Sebastian Vettel. La carrera inaugural del curso en Melbourne Park, que solo finalizaron 13 pilotos, dejó un sabor agridulce a Alonso, quien rompió los pronósticos al pelear por los puntos durante gran parte de la carrera, pero que no pudo evitar el abandono a tres vueltas de la bandera a cuadros. “Estoy listo para una carrera difícil y dura”, ha dicho el asturiano a su llegada a Shanghái, consciente de que las largas rectas del circuito chino, que tiene la segunda más extensa de todo el campeonato solo por detrás de Bakú, desnuda las carencias de su MCL32 en cuanto a la falta de velocidad punta.
Mucho mejor ha comenzado el año Carlos Sainz (Toro Rosso), que logró finalizar octavo en Melbourne justo por delante de su compañeros de equipo Daniil Kvyat. Los poderosos Ferrari y Mercedes, Force India y Toro Rosso fueron los únicos equipos capaces de colocar a sus dos pilotos en el ‘Top 10’ y el piloto madrileño llega decidido a puntuar en China por tercer año consecutivo.
LA LLUVIA, CLAVE En la parte noble de la clasificación, Vettel sorprendió en Australia y por primera vez desde 2013, precisamente cuando ganó el último de sus cuatro títulos, lidera el Mundial un piloto que no corre para el equipo Mercedes. Ferrari no empieza el año con dos victorias consecutivas desde 2004, cuando Michael Schumacher era el caudillo de la Fórmula 1, y, tras cerrar una sequía de victorias que se remontaba a septiembre de 2015, la Scuderia vuelve a tener un ambicioso objetivo que cumplir este fin de semana.
Sin embargo, encontrará la dura resistencia de las flechas plateadas y especialmente de Lewis Hamilton, el piloto más laureado del circuito chino con un total de cuatro victorias. De los pilotos en activo, tan solo Alonso (2005), Kimi Raikkonen (2007) y Vettel (2009) saben lo que es reinar en Shanghái. Esta lucha por la victoria, a la que espera sumarse Red Bull tras su gris inicio de campaña, puede estar muy marcada por el clima, ya que hay pronóstico de lluvia durante todo el fin de semana, una circunstancia que puede trastocar los planes de los equipos y añadir aún más incertidumbre a la segunda cita del curso. - E.P.