BILBAO. El más crítico fue Oinatz Bengoetxea. El delantero navarro aseguró sentirse "muy decepcionado", e incluso "con poca ilusión" para la final, al comprobar que las pelotas apartadas por Irribarria y Rezusta -de 104,9, 104,5 y 105,7 gramos- "cogen mucho bote, una de ellas de cuatro metros para arriba".
"No me lo esperaba, pensaba que se respetaría la final. Las tres de ellos son muy vivas y todavía están nuevas, cuando se levante un poco el cuero van a salir todavía más. Estoy muy, muy enfadado. Vamos a venir a por todas, pero con este material se complica todavía más", relató Bengoetxea VI.
Su compañero Larunbe cree que con la viveza de los cueros sus rivales van a intentar cargar el juego sobre los cuadros traseros.
"Van a intentar dejar a Oinatz fuera de juego porque saben que delante es un artista y tiene capacidad de enredarles. Ese va a ser el guión del partido", auguró.
Tampoco han acabado contentos del material elegido por sus rivales Irribarria y Rezusta. El delantero aseguró que el cestaño de los pelotaris de Asegarce rivales tendrá el domingo tres pelotas -de 105,1, 104,8 y 105,7 gramos- que "no botan nada, ni salen nada del frontis".
"Con nuestro material nos hemos quedado a gusto, hemos encontrado lo que queríamos. El suyo ni bota ni sale del frontis. Si te echan el pastel a ti, tú también tienes que echarle al otro. Nosotros tampoco estamos nada contentos", dijo Irribarria.
Más contundente ha sido su zaguero Beñat Rezusta. "Estamos oyendo siempre la misma tontería y uno se cansa por que son ya 17 ó 18 partidos y en ninguno nos han dejado tranquilos. Puede determinar algunos tantos, pero solo por el material no se gana un partido y menos un campeonato", sentenció.
El pelotari de Bergara añadió que a lo largo de la competición han "demostrado que con las pelotas de los demás" también son capaces de ganar y zanjó el asunto recalcando que "ya es hora de concentrarse en la final y no en el material".