DONOSTIA. Lubanzadio dijo haber sido objeto de insultos racistas por parte de un central del Sanguntino durante un partido de la Copa Federación que enfrentó el miércoles en el Stadium Gal de Irun a estos dos equipos que militan en la Segunda B.
Según su relato, un central del equipo valenciano le llamó "puto negro" y "negro de mierda" tras un lance del juego, sin que ninguno de los integrantes del trío arbitral tomara medidas.
Lubanzadio, bilbaino de padre africano, relató ayer que abandonó el campo entre lágrimas ante la "rabia e impotencia" que sintió por lo ocurrido, tras lo cual tuvo un cruce de palabras en el túnel de vestuarios con el linier, a quien admitió haber llamado "cagón" por no haber intervenido durante el partido cuando fue insultado.
Esta discusión con el asistente fue reflejada en el acta del partido, que reza literalmente que "una vez finalizado el partido, y dentro del túnel de vestuarios, el jugador número 15 del Real Unión se ha dirigido al asistente número 1 señalándole con su dedo índice a escasos centímetros de la cara, empujándole y recriminándole algo que ha ocurrido durante el partido. En ese momento, las fuerzas y cuerpos de seguridad han intervenido sujetando a dicho jugador".
Por este motivo, la Federación Española de Fútbol ha impuesto al jugador una sanción de cuatro partidos y una multa de 600 euros, según ha informado el club guipuzcoano.
El delantero del Real Unión tendrá que cumplir la sanción en la Copa Federación y también en la competición liguera, han precisado las mismas fuentes.
El jugador ha recibido diversas muestras de solidaridad tras su denuncia de racismo por parte de otros clubes y también por parte del Ayuntamiento de Irun y de la Diputación de Gipuzkoa, cuyo presidente, Markel Olano, acudirá mañana al Stadium Gal para respaldar en persona a Thaylor Lubanzadio.