Duración: 78 minutos de juego.
Saques: Ninguno.
Pelotazos: 729 pelotazos en juego.
Tantos en juego: 13 de Olaizola II y 10 de Urrutikoetxea.
Errores: 6 de Olaizola II, 6 de Untoria, 4 de Urrutikoetxea y 4 de Imaz.
Marcador: 2-0, 2-2, 3-2, 3-3, 8-3, 8-4, 11-4, 11-9, 13-9, 13-10, 14-10, 14-11, 15-11, 15-12, 15-13, 16-13, 18-13, 18-17, 19-17, 19-19, 19-21, 21-21 y 21-22.
Botilleros: No hubo botilleros al ser las dos parejas de la misma empresa, Asegarce.
Apuestas: Se cantaron de salida posturas de 100 a 60 a favor de Olaizola II-Untoria.
Incidencias: Partido correspondiente a la duodécima jornada de la liguilla cuartos de final del Campeonato de Parejas de Primera de la LEP.M disputado en el frontón Beotibar de Tolosa. 440 espectadores.
TOLOSA - El Parejas es un camino de espinas. No hay perdón que valga, ni partido tranquilo, ni tarde de rutina. Mikel Urrutikoetxea, el pelotari mejor valorado de todo el campeonato a pesar de no haber sumado demasiados triunfos, y Ander Imaz debaten en la resistencia, peleando a la contra, remando con el viento de cara. Y no se esconden. En su esquema de dueto que parecía enterrado, pero al que no terminan de dar pasaporte, está la búsqueda de una semana más de aliento. Así andan desde la primera vuelta y así se están llevando a varias combinaciones por delante. La persistencia del de Zaratamo y del de Oiartzun está dejando la cuneta de la competición más larga del curso llena de desperfectos. Con complicadas opciones matemáticas, que pasan por ganar los dos partidos que les quedan -ante Elezkano II-Zabaleta e Irribarria-Rezusta- y esperar acontecimientos, su victoria de ayer en el Beotibar de Tolosa ante Aimar Olaizola y Álvaro Untoria deja a sus compañeros de Asegarce tocados, empatados a puntos con ellos y con la necesidad de vencer todo lo que les queda -Ezkurdia-Merino II y Artola-Albisu-. El enredo de los supervivientes ya condenó a Altuna III-Barriola y lleva camino de ir dando pimienta clasificatoria a cada paso, con el que asoman más grandes y peligrosos.
Olaizola II-Untoria volvieron a ser víctimas como lo fueron en el Bizkaia de Bilbao en la primera vuelta. El goizuetarra y el najerino sufrieron una derrota similar, que se les escapó de las manos como arena entre los dedos, cuando ya estaba prácticamente dominada a mitad de tajo. El zaguero riojano no estuvo a la altura del choque y, a pesar de empezar aseado y bien, dominando a Imaz, terminó con seis yerros, todos ellos del 11-4 en adelante, cuestión capital para la explicación de la cita. El navarro acabó con trece tantos hechos y asomó fino, currante y quiso salvar los muebles cuando pintaban bastos. Entonces, el aliento en la nuca (15-13) había puesto el rostro pálido a Untoria y el partido en problemas. Un fallo de Mikel dio la alternativa a los colorados. Aimar logró una tajada de dos tantos para ampliar las diferencias en el segundo descanso largo (18-13).
El choque ya iba para extenso y el traqueteo impulsó a Imaz. Las dudas acuchillaron a su homólogo y él creció. En la disputa, quedó Olaizola II desnortado, sin pelota, esquivado, para que Urrutikoetxea asomara en versión dinámica y activa. Gracias a él, el duelo quedó empatado a 19. Una chapa de Aimar y otro error de Untoria pusieron por delante a los azules (19-21), pero una escapada de Imaz que fue mala por un centímetro devolvió la fe colorada. Aimar se la jugó y empató. Después de más de setecientos pelotazos, Urrutikoetxea, que volvió a acabar con la derecha justa por la dureza de la cita, no quiso más emoción y selló la tarde con un dos paredes de volea. El vizcaíno se encargó de poner un poco más tortuoso el Parejas, que comienza a pedir peaje por las oportunidades derrochadas.