sito Alonso achacaba la derrota contra el Barcelona en el Buesa más a un cansancio mental que al físico, pero pienso que un porcentaje, no sé cuál, se debió al cansancio físico. Jugar en 48 horas dos partidos contra el mismo rival, a nivel de preparación mental, no es nada fácil. Pero a nivel físico tampoco. Después de haber vapuleado a los azulgranas en el Palau, seguro que inconscientemente los jugadores del Baskonia prepararon el partido con un estado de ánimo muy diferente del que hubieran tenido si se hubiese perdido en Barcelona. La irregular temporada del equipo de Bartzokas, las lesiones, los cambios en la plantilla, las dificultades que está demostrando esta temporada para ganar fuera de casa, el bajo rendimiento de ciertos jugadores, los salarios insostenibles de ciertos jugadores que no rinden en la misma medida que desequilibran el presupuesto y la maniobrabilidad, o la derrota abultada en el Palau hacían pensar en un nuevo trámite. Pero, aunque ya estemos acostumbrados a jugar contra este tipo de equipazos, no hay que olvidar que el Barça es el Barça. A nivel mental ganó el que más necesitaba ganar, y ese no fue otro que el Barcelona. Además, el equipo blaugrana fue el amo y señor de la pintura, donde anotó más de la mitad de los puntos, y también dominó el rebote al aprovecharse de las segundas opciones, algo que dice muy poco de los pívots baskonistas en una noche aciaga. Con solo decir que los exteriores baskonistas capturaron los mismos rebotes defensivos que los Bargnani, Diop, Tillie y Voigtmann juntos, nos da una idea de las dificultades que pasaron los hombres de Sito cerca del aro. Y en rebotes totales los exteriores consiguieron uno más que los interiores. El más señalado es el tan esperado Bargnani, que entre todos los problemas de salud que viene sufriendo no está buscando su lugar en el equipo. A día de hoy, está ocupando un rol que no era por el que se le había fichado ni por el salario que se le está pagando. No es de recibo que Diop tenga más peso específico en el equipo y mayor responsabilidad que el italiano. Si la cúpula baskonista lleva ya un tiempo con la mosca detrás de la oreja, creo que ahora el cuerpo técnico también está empezando a perder la paciencia y la confianza en Bargnani. Y mira que Sito Alonso lo ha querido proteger de las críticas feroces. Pero lo evidente no se puede ocultar, y a día de hoy el transalpino no está ayudando en nada al equipo. Esperemos que de cara a la Copa, que está a la vuelta de la esquina, haya un cambio y empiece a rendir y a cubrir las expectativas generadas cuando se le fichó. Además, ya sabemos que para ganar la Copa hay que sufrir un gran desgaste físico, y según las últimas sensaciones, el equipo no está asimilando esfuerzos tan seguidos. Por eso, me reitero en la necesidad de que jugadores como Bargnani, Beaubois o Budinger den un paso adelante y empiecen a ser más regulares. Desde el punto de vista físico, veo una merma en jugadores claves como Larkin y Hanga, que llevan muchos kilómetros en sus piernas. Entra dentro de lo normal el que esa merma física repercuta directamente en su rendimiento. Este viernes visita el Buesa Arena otro miura, que ya sabe lo que es perder contra el Baskonia esta temporada. Esperemos ver la mejor versión de los nuestros, ya que la necesitarán.
