GASTEIZ - Jorge Nagore, Titín III, Sébastien Gonzalez y Mikel Urrutikoetxea han sido los únicos manistas capaces de acabar con el dominio férreo en el Cuatro y Medio de Aimar Olaizola, siete veces campeón (2002, 2004, 2005, 2008, 2011, 2012 y 2013), y Juan Martínez de Irujo, tres veces ganador (2006, 2010 y 2014). Desde que el goizuetarra sumara su primer campeonato de Primera, el acotado de 2002, justo el primero que organizó la Liga de Empresas como tal, a la que se llegó después de años de trinchera entre Aspe y Asegarce, la competición tuvo el marcado acento de los dos campeones, solamente derribado por cuatro invitados a la gloria. El de Irurtzun triunfó en 2003 ante Titín en una edición en la que no fue de la partida el de Goizueta. El caracolero se llevó la txapela ante Abel Barriola en 2007. El delantero de Ibero, por su parte, fue abatido en 2009 por Gonzalez y en 2015 por Urrutikoetxea.

Después de más de una década de escasos tropiezos de los dos gallos, en especial de Olaizola II, quien solamente ha perdido una final en toda su carrera en la jaula, ante Martínez de Irujo en 2014, Oinatz Bengoetxea y Jokin Altuna tienen la oportunidad de dar otro giro de timón a la pelota a mano profesional. Si bien el leitzarra conoce las mieles de estar en la élite y en los primeros peldaños de las competiciones, la oportunidad que se le presenta es de oro: está con juego y desborda experiencia ante un contrincante imberbe en estas lides. Por su parte, Altuna III certifica el cambio generacional en Aspe -al estar Irujo aún de baja-, donde se asoma como el delantero más destacado junto con Iker Irribarria, ambos con 20 años, Danel Elezkano y Joseba Ezkurdia. La victoria ante un dañado Olaizola II en la semifinal del acotado refrendó su vitola de valor profesional de presente y de futuro.

Así las cosas, el leitzarra y el amezketarra esperan inaugurar su contador de títulos dentro de la especialidad, cerrada hasta el momento para ellos. Bengoetxea VI alcanzó la pelea por el cetro en 2012, pero la mala fortuna le quitó el último paso. Comenzó encajando un 13-0 que dejó el partido visto para sentencia en veinte minutos. Además, tuvo que aplazar la final por fiebre y la mordedura de un perro. Los nervios en el duelo le pasaron factura contra un Olaizola II que es una máquina de procesar juego en el acotado. Esta es la sexta final a la que llega: dos del Manomanista (2008 y 2015, aunque no pudo jugar por una fractura en el dedo), dos del Parejas (2005 y 2014) y dos del Cuatro y Medio (2012 y 2016).

Por su parte, Altuna III está ante el partido más importante de su vida hasta el momento. Casi todo le ha venido rodado y, a pesar de cargarse de estrés en la primera semana de preparación, en la elección de material asomaba tranquilo ante los focos. Pase lo que pase, la jaula verá hoy a un nuevo campeón.

la actualidad Por otro lado, ayer se disputó un festival manista profesional en Fuenmayor en el que Mikel Urrutikoetxea fue de la partida. El delantero de Zaratamo mezcló con Rubén Salaverri sin éxito ante Víctor Esteban y Jon Ander Albisu. El vizcaíno y el riojano cayeron por 22-8.

Además, en el frontón Bizkaia de Bilbao, Necol-Ibargarai y Fusto-Gordon ganaron sus compromisos de la Liga Kutxabank de pala profesional. Los primeros derrotaron a Zubiri-Brefel en un gran duelo (7-10, 10-6, 10-9, 8-10 y 5-10) y los segundos ganaron a Landeta-Imanol (10-4, 10-9 y 10-7).