Madrid - El Real Madrid regresa a su querida Lisboa, la ciudad donde conquistó la Décima Copa de Europa, para medirse a un Sporting de Portugal que busca recuperar con un triunfo las opciones perdidas en un grupo en el que los de Zinedine Zidane están sin margen de fallo si quieren acabar líderes.
La relajación en Varsovia y sentirse superior al equipo más modesto del grupo, el Legia, lo pagó caro el Real Madrid con un empate que le condiciona en las dos jornadas finales. Visita al Sporting de Portugal y se jugará el primer puesto en el Santiago Bernabéu ante el Dortmund.
Los dos empates en las dos salidas de Liga de Campeones obligan al Real Madrid a extender la mejor de sus versiones, la que dejó en el derbi madrileño del Vicente Calderón para golear al Atlético de Madrid y asestar un buen golpe a un rival directo por el título de Liga.
El encuentro ante el Sporting de Portugal tienen una connotación especial para Cristiano Ronaldo. Regresa a la casa en la que se formó, donde asombró en sus primeros pasos y mostró que había nacido para ser una gran estrella del fútbol. A su cita más especial llega tras reencontrarse con su mejor imagen, firmando un triplete en uno de esos días marcados en el calendario, para enterrar su irregularidad y acercarse un poco más al Balón de Oro.
La firmeza del Real Madrid en el derbi madrileño provoca un problema para Zidane. La BBC es indiscutible para él pero quedó demostrado que modificando el 4-3-3 a un 4-2-3-1 con Isco de media punta, Gareth Bale en su sitio natural en la izquierda, Lucas en la derecha y Cristiano como nueve imponente, su equipo gana en orden y equilibrio. Sin embargo Benzema está para jugar y dos suplencias consecutivas sería una situación inédita.
Todo indica a que el capitán Sergio Ramos regresará al centro de la zaga y Zidane debe decidir si sentar a Nacho en un momento de forma magnífico o a Varane. Ante las ausencias de centrocampistas destructivos por lesión, Casemiro y Kroos, dará continuidad al doble pivote de Kovacic y Modric. La exhibición de Isco en el Calderón le da continuidad, por lo que será Lucas el sacrificado si entra Benzema. - Efe
