donostia - “Me ha salido un partido redondo”, reveló al término de la semifinal Jokin Altuna. El delantero de Amezketa señaló que “he jugado bien y me he sentido a gusto. Aimar Olaizola estuvo muy bien en la liguilla y yo no, pero me he encontrado con chispa en este partido”. El manista, con 20 años, entrará por primera vez en una final de Primera como profesional y declaró que “a pesar de llevar distancia en el marcador, siempre tienes miedo de Aimar, porque cuando coge el saque tiene mucho peligro”. “Por fuera, parece que Olaizola II estaba jugando al tran tran. En la cancha, él no falla, aguanta mucho y si le quieres ganar, tienes que acabar el tanto. Eso da presión. He dado dos chapas y dos faltas, porque he ido a muerte en el saque. Estoy satisfecho de cómo he sacado”, agregó.

Por otro lado, valoró que “llevo dos años y cuatro meses en el campo profesional y es mi primera final, pero lo que más me importa es que estoy mejorando poco a poco”. Se medirá a Bengoetxea VI el próximo 27 de noviembre. Saldrá un campeón nuevo. “Oinatz está a tope y le veía tan bien como al resto. No ha tenido demasiadas oportunidades en verano y ha preparado a conciencia el campeonato. Será difícil ganarle”, finalizó.

Por otro lado, Aimar Olaizola, después de encajar la derrota el mismo día que cumplía 37 años, manifestó que “estoy un poco triste, porque mi objetivo era llegar a la final. He hecho un mal partido y he acabado con molestias”. El hombro izquierdo, que le hizo renunciar al Cuatro y Medio de San Fermín, le dio guerra “a partir del quinto tanto”. “He notado un pinchazo y he ido con miedo a darle a la pelota. Así es imposible. He jugado mal”, desgranó el goizuetarra, quien aseveró que “no sé si es una sorpresa. Siempre no vamos a estar los mismos como favoritos. Los jóvenes tienen que tomar responsabilidades”.