Duración 1 hora y 5 minutos de partido.

Saques 2 para Bengoetxea y una falta de saque, y 3 para Urruti.

Pelotazos 292 pelotazos a buena.

Tantos en juego 15 de Oinatz por 13 de Urruti.

Errores 4 de Oinatz por 5 de Urruti.

Marcador 0-3, 2-3, 2-5, 5-5, 5-8, 12-8, 12-9, 13-9, 13-13, 14-13, 14-14, 15-14, 15-15, 19-15, 19-18, 21-18, 21-21, 22-21.

Incidencias Primer partido de las semifinales del Cuatro y Medio de la LEP.M disputado en el Frontón Labrit. Lleno hasta la bandera, 1.200 espectadores.

PAMPLONA - Oinatz Bengoetxea certificó ayer el pase a su segunda final del Cuatro y Medio tras una victoria por fortuna, pero merecida, ante uno de los favoritos a la txapela, Mikel Urrutikoetxea. El pelotari de Leitza fue mejor que su rival, paralizando con su eléctrico ritmo a un Urruti al que, a pesar de no jugar uno de sus mejores partidos, sobrevivió y tuvo la victoria en su mano. Pero en la suerte del 21 iguales, al de Zaratamo se le enganchó una pelota que mandó cerca de la grada un dos paredes con el que se despedía de tener la oportunidad de revalidar el título que consiguió el año pasado.

Comenzó el partido con un Urruti muy fino con el saque. El vizcaíno encadenó tres tantos seguidos con el disparo inicial a un rival que no había encajado ninguno en todo el torneo. Pero en el primer saque que pudo devolver Oinatz, se llevó el tanto. Entonces, el partido entró en un precioso tramo en el que ambos pelotaris mostraron todo su arsenal. Mientras el colorado imprimía velocidad a la pelota moviendo a su rival, Urruti intentaba madurar el tanto y acabar con unos ganchos que dibujaba de forma perfecta.

Llegaba así al partido a la igualada a 15 en un momento del partido que no le venía nada bien a Bengoetxea. Como ya avisó en la elección de material, el navarro no quería que el partido se alargase, y menos contra un rival con el físico del de Zarátamo. Por ello, Oinatz buscó meter ritmo al partido y bajarle la pelota al espigado vizcaíno, buscando ir directo al cartón 22 haciendo su juego. Y casi lo consigue. El pelotari colorado encadenó cuatro tantos seguidos, y el público que ambientó el Labrit -magnífico, como siempre- se volcaba con el leitzarra. Pero Oinatz cometería un error que le pudo salir caro. Se pasó de la distancia en su saque, algo que le desconcentró, dándole alas a Urruti.

El vigente campeón recortó distancias, pero no pudo evitar un 21-18 que parecía definitivo viendo el partido de Oinatz. Pero Urruti, que ya sabemos como se las gasta en esto de las remontadas, nunca le perdió la cara al partido y confió en sí mismo para lograr una voltereta que ya ha protagonizado en más de una ocasión. Logró empatar a 21, algo que con el saque a favor siempre da ventaja. Sacó bien, pero se equivocó en el remate. Quiso terminar pronto, y se le enganchó en la mano un dos paredes horrible que, para alegría de Bengoetxea, terminó en la contracancha.

El vizcaíno se equivocó y dio la oportunidad a Oinatz de poder luchar por su primera txapela en la ‘jaula’. El leitzarra ha sido uno de los mejores pelotaris del torneo, aunque ayer ganase por fortuna. Y es que, la suerte, fue merecida.