Bilbao - Miguel Cardenal cerró ayer su etapa como presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), desde el cual canalizó la reducción de la pantagruélica deuda del fútbol español. El abogado bilbaino justificó su marcha porque, según él, sería “poco coherente” alargar su mandato hasta los 9 años. En su despedida del cargo que ha ostentado durante cinco años, el dirigente se felicitó por los éxitos de los deportistas españoles pese a los recortes. Parafraseando a Gabriel García Márquez, que dijo aquello de que el periodismo “era el mejor oficio del mundo”, Cardenal expuso que deja “el trabajo más bonito” que ha tenido. Realizando un repaso de su etapa al frente del Consejo, Cardenal recordó que ha vivido dos Juegos Olímpicos de verano, los de Londres 2012 y Río 2016, y otros de invierno, en 2014 en Sochi. “Como secretario de Estado para el Deporte he tratado de ayudar a la transformación del deporte español. Con esta nueva legislatura de cuatro años, llegaría a estar 9 años en el cargo, y es poco coherente alargar mi mandato durante tanto tiempo”.

Asimismo, Cardenal insistió en que ha valorado continuar una parte de la legislatura para trabajar en la venta centralizada de los derechos de televisión en el fútbol. “Quería trabajar en un entorno económico distinto, pero entiendo que ahora mismo hay que tomar decisiones importantes que van a condicionar todo el ciclo, como el nuevo Plan ADO, que se tiene que adaptar a los cambios”, argumentó. “Con esta valoración y conociendo la noticia, le trasladé al ministro mi intención de dejar paso a otra persona al frente del CSD.”, insistió. Cardenal indicó que el ministro Méndez de Vigo le comunicó que “necesitaba un poco de tiempo” para nombrar a su sustituto.

Por otra parte, el abogado hizo una valoración acerca de su etapa en el CSD. “Son casi 5 años los que llevo en el CSD y gracias al trabajo de tanta gente, hemos cambiado aspectos muy importantes del deporte español, como el problema económico que atravesaba el fútbol profesional. Un problema endémico que, agudizado por la crisis económica, hizo que muchos equipos presentarán Concurso de Acreedores”, subrayó Cardenal. Destacó las reformas que se impulsaron en 2012 con el acuerdo con la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para la reducción y el pago de deudas con la Hacienda Públicas. “El panorama ha cambiado y el fútbol español profesional está mucho mejor”, dijo Cardenal que ha mantenido una guerra abierta con Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol, durante su mandato.