BILBAO - Iker Irribarria lo verá desde la grada. Estará presente en el encuentro de hoy en Agurain en el que se decidirá quién es el pelotari con el que abrirá su camino en el Cuatro y Medio, dado que es el único de toda la parrilla de salida del campeonato que abre la temporada manista que no conoce aún qué contendiente tendrá enfrente. En el duelo que estrena la competición, la primera tras la frenética actividad veraniega, previsto para el viernes en el frontón Municipal de Bergara (17.00 horas), el actual poseedor de la txapela del Manomanista no sabe si será Jon Jaunarena el hueso que tendrá enfrente o Erik Jaka. “Los dos pelotaris se juegan mucho. Están a muy buen nivel. Costará enfrentarse al que venga, porque tampoco es mi modalidad el Cuatro y Medio”, desgrana el zurdo de Arama.
La realidad es que tanto Jaunarena como Jaka son las principales víctimas del cambio de sistema de la jaula. La reducción de ocho pelotaris por empresa a seis, elimina dos huecos que bien podían ser para ellos. En teoría, la disputa estaba entre el leitzarra, el lizartzarra, Danel Elezkano y Aitor Mendizabal, pero las lesiones de los dos últimos echaron abajo los dos primeros compromisos de previa. Así, impulsaron a los jóvenes delanteros de Aspe a la final por el billete deseado para la fase oficial del torneo.
Al envite de Agurain aterrizan los dos puntilleros después de haber evitado a dos contendientes de alto nivel. Mendizabal III, ganador del cetro de Segunda en 2011, es un viejo conocido en Primera, capaz de derrotar a Joseba Ezkurdia, pelotari con mucha más envergadura. El zurdo de Antzuola, hábil y tremendamente competitivo, actual triunfador del Manomanista de Segunda sin la pegada de un castigador, ha rayado los últimos meses a gran altura y apuró para llegar al duelo de la pasada semana en Oñati. Sin embargo, una rotura de fibras en el cuádriceps derecho el mismo día de la contienda tiró al guipuzcoano de la cita ante Jaunarena. A Jaka, subcampeón de plata de 2015, le tocaba otro pelotari con pedigrí: Elezkano II. Competitivo hasta el tuétano, atacante extremo y físicamente muy fuerte, Danel aportaba poso al cuarteto. Con Asegarce, empresa de la que se desvinculó en agosto, hubiera estado entre los seis seleccionados fijo. El mal de manos en la zurda evitó su presencia en la cita y dejó a Mikel Urrutikoetxea como única opción vizcaína a la txapela.
De cualquier modo, Jaunarena y Jaka se juegan hoy, en un festival que empieza a las 17.00 horas en la localidad alavesa, un hueco en un torneo de Primera. El delantero de Leitza, más experimentado y con veteranía -debutó en 2010-, está ante una oportunidad importante para poner en valor su juego ante los rectores de su empresa, Aspe. Y es que, tras acabar muy tocado anímicamente el Manomanista, en el que Irribarria le pasó por encima en Soria (2-22), el navarro puede llamar a la puerta de los campeonatos de Primera por méritos propios y volver a enfrentarse al zurdo aramarra en busca de una revancha. Es indudable que la presión de la victoria recae sobre él: posee la txapela de Segunda (2012) y desde entonces ha disputado de forma ininterrumpida la jaula de oro. En su haber tiene tres derrotas y una victoria: ante Víctor el año pasado. Después, en octavos de final, Retegi Bi le dejó en cinco.
Por su parte, Jaka podrá reivindicarse si gana. El delantero lleva unos meses en los que ha afinado su forma física y tiene grandes dotes de remate en los cuadros alegres. En su palmarés se acodan dos Parejas de Segunda (2015 y 2016) y un subcampeonato del Cuatro y Medio de Segunda (2015). El salto sería un premio.