bélgica - El equipo McLaren-Honda protagonizó un pésimo retorno a la actividad en el Gran Premio de Bélgica, ya que el nuevo motor evolucionado en el coche de Fernando Alonso se rompió nada más salir a Spa-Francorchamps, dejando inédito al piloto español en una sesión de entrenamientos libres dominada por Nico Rosberg (Mercedes). Tras un mes de parón veraniego en el Mundial de Fórmula 1, las expectativas eran altas en McLaren por las anunciadas mejoras en su unidad de potencia, pero Alonso tan solo pudo rodar tres vueltas de instalación sin marcar tiempos hasta que su MP4-31 sufrió una fuga hidráulica. “La sesión de Fernando ha acabado. Después de una inspección se ha decidido cambiar su unidad de potencia”, anunciaba el equipo británico confirmando el peor presagio. Su compañero de equipo Jenson Button pudo completar 18 vueltas, pero finalizó en la decimoctava posición con más de cuatro segundos perdidos sobre el líder. Ese puesto de honor correspondió a Rosberg, que llegó a Spa decidido a romper su mala racha y recortar su distancia sobre Lewis Hamilton, segundo a más de siete décimas de su compañero de equipo y máximo rival por el título. Tal y como había anunciado, el inglés cambió su unidad de potencia y sufrirá una sanción de 15 puestos en la parrilla de salida.
Por su parte, Carlos Sainz solo pudo ser decimocuarto, aunque le quedó el ‘consuelo’ de superar por casi un segundo a su compañero Daniil Kvyat (Toro Rosso). La segunda sesión de libres, de nuevo con pronóstico de clima despejado en el trazado belga, comenzará hoy a las 14.00 horas. - DNA