Cuatro etapas seguidas con otros tantos finales en alto, aunque con una jornada de descanso intercalada, es el cuadrangular en el que se van a examinar los principales aspirantes al maillot rojo de la Vuelta en los próximos días.
El Alto de la Camperona en el leonés valle de Sabero es el primero de esos cuatro exámenes en los que Atapuma (BMC), sobre el que descansa el liderato los cinco últimos días, junto a Valverde y Quintana (Movistar), Froome (Sky), Chaves (Orica) y Contador (Tinkoff), a los que puede sumarse algún otro, deberán tomar las riendas de la carrera y empezar a dejar notar cuales pueden ser sus opciones reales.
La Camperona en León, el Naranco y los Lagos de Covadonga en Asturias, y Peña Cabarga en Cantabria, aunque esta última llegará tras la jornada de descanso, verán en sus rampas entrar en acción a los mejores.
De las cuatro jornadas, la primera en La Camperona y la última en Peña Cabarga presentan características muy similares con la práctica totalidad del recorrido sin grandes desniveles para afrontar los kilómetros finales en ascensión a subidas, en ambos casos catalogadas de primera categoría.
Tras el final leonés se llegará a Oviedo con final en uno de los finales en alto más tradicionales como es el Alto del Naranco, de segunda categoría, precedido de una casi interminable serie de tachuelas.
Otro de los finales en alto es la subida a Lagos de Covadonga, una llegada que desde su debut en 1983 con victoria de Marino Lejarreta, siempre ha sido especialmente temida, a pesar de que en las últimas ediciones no ha sido tan decisiva. Previamente a los Lagos se pasará por el siempre temido Mirador del Fito.
El director italiano del Sky Dario Cioni comentó que sin haber llegado la alta montaña en la Vuelta “ya hay muchos corredores cansados” y recordó estos cuatro finales en alto en los cinco próximos días entre las etapas octava y undécima.