río - La selección española masculina de baloncesto peleará por la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, después de perder ayer frente a Estados Unidos (76-82) emulando lo que ocurrió en las finales de Pekín’08 y Londres’12, donde España también dio la cara pero no pudo evitar la derrota ante el combinado de estrellas NBA. De la mano de Pau Gasol (23 puntos, 8 rebotes), de nuevo imperial pese a arrastrar una contractura en el gemelo derecho, España volvió a permitirse soñar con la épica, pero la puntería de Klay Thompson (22) y, sobre todo, la superioridad física del Dream Team, personificada en la enorme figura de DeAndre Jordan (16 rebotes y 4 tapones), fueron obstáculos demasiados grandes. Pese al ajustado marcador final, el equipo entrenado por Sergio Scariolo nunca disfrutó de opciones reales de llevarse el partido, lo que no resta mérito a su capacidad de lucha frente a un equipo que, pese a no contar con grandes figuras como LeBron James o Stephen Curry, sigue atesorando talento de sobra para perpetuarse como indiscutible favorito.
Ahora, el objetivo es recuperar fuerzas para la batalla por el bronce, que disputarán el domingo contra Australia (16.30 hora española), y lograr la cuarta medalla olímpica después de tres platas.
Esta vez Gasol estuvo demasiado solo en ataque, pese al ímpetu de Rudy Fernández, y eso impidió que España tuviera a tiro la campanada, a pesar de la gran defensa colectiva que dejó al Dream Team muy lejos de su anotación habitual. La sangría en el rebote en el primer cuarto (6-16) sentó la base de la ventaja norteamericana desde el primer cuarto (17-26), en el que Gasol, con 12 puntos, no encontraba ayuda ofensiva.
En parte fue por los problemas de faltas, dos rápidas tantos de Ricky Rubio como de Nikola Mirotic. El hispano-montenegrino cometió la cuarta antes del descanso y apenas pudo ayudar al equipo, después de erigirse en máximo anotador en el cruce con Francia. Aún así, España aguantaba el tipo al descanso (39-45) después de un segundo cuarto que los árbitros escogieron para convertirse en protagonistas. Hasta cinco faltas técnicas se repartieron Christodoulou y sus secuaces: Scariolo, Paul George, Kevin Durant, Mirotic y Felipe Reyes. Al menos tanto parón servía para detener el ritmo del partido, al tiempo que España parecía controlar la sangría al rebote, un día más con buenos minutos de Willy Hernangómez. Tras un tiro de Durant que no tocó ni el aro, Rudy acertaba desde el triple y España volvía pisar los talones al ‘gigante’ (35-38, min.18).
Al descanso, Thompson era el hombre inspirado del día y amenazaba con ser el clásico verdugo español, papel que ya adoptaron en su día Stephon Marbury (31 puntos en Atenas 2004) o Durant (30 en Londres 2012). Igual que en las finales de Pekín (-8) y Londres (-1) la desventaja era tolerable después de dos cuartos, pero seguía antojándose lejana la sorpresa. Durante toda la segunda mitad, la diferencia a favor de Estados Unidos se movió entre los cinco de mínima (48-53, min.25 tras un triple de Llull) y los quince de máxima diferencia (57-72, min.32), un margen en el que los pupilos de Mike Krzyzewski se sintieron cómodos. Al final y al cabo, solo habían ganado por tres tantos a Serbia y Francia.
Cada vez que España inquietaba en el marcador, su rival volvía a apretar el acelerador en el apartado físico, procurándose segundas e incluso terceras opciones que provocaban que la jugada acabara en anotación, ya fuera por lo civil o por lo criminal. La eliminación tempranera de DeMarcus Cousins en el tercer cuarto apenas importó porque Jordan seguía intimidando a niveles monstruosos.
De hecho, a Sergio Rodríguez no le quedó más remedió que apartar de un manotazo en la cara al pívot de Los Angeles Clippers para evitar el tapón cuando hacía una entrada a canasta. Los árbitros castigaron la acción con falta en ataque y, a falta de poco más de dos minutos y con 69-78 en el marcador, la acción olió a sentencia para España. El despertar tardío de Mirotic y los buenos minutos del Chacho y Juan Carlos Navarro sirvieron para ajustar el marcador, pero Estados Unidos no sufrió en los últimos minutos pese a su victoria poco abultada, como ya ocurrió en China (118-107) e Inglaterra (107-100). La ovación final del Arena Carioca premió el enésimo esfuerzo de la mejor generación del baloncesto español, que todavía puede poner un broche de bronce a su década gloriosa. - Europa Press
España76
Estados Unidos82
ESPAÑA: Rubio (-), Llull (5), Rudy Fernández (9), Mirotic (7) y Gasol (23) --quinteto inicial--; Sergio Rodríguez (11), Navarro (9), Claver (5), Reyes (3) y Hernangómez (4).
ESTADOS UNIDOS: Irving (13), Thompson (22), Durant (14), Anthony (7) y Jordan (9) --quinteto inicial--; Butler (-), Lowry (9), Cousins (2), George (6) y Green (-).
Parciales: 17-26, 22-19 (descanso), 18-21 y 19-16.
Árbitros: Christodoulou (Grecia), Reys (México) y Locatelli (Brasil). Eliminado por faltas personales Cousins (min.30).
Incidencias: Primer partido de las semifinales del torneo olímpico de los Juegos de Río de Janeiro disputado en el Arena Carioca 1 ante 10.455 espectadores.