vitoria - La capital alavesa tiene en Manuel Pereira a uno de los mejores exponentes de las artes marciales. A sus 33 años ha logrado proclamarse Campeón de Europa en la modalidad de Shuai Chiao y dos veces Campeón del Mundo en Kung Fu Sanda. El gasteiztarra abre las puertas del gimnasio Fitness Gasteiz para acercarnos a un mundo marcial de apariencia agresiva pero en el que predomina la nobleza y que tiene gran auge en Vitoria.
Practica las modalidades de Kung Fu Sanda y Shuai Chiao. ¿Nos puedes explicar en qué consisten?
-Primero, explicar que el Kung Fu es el general de las artes marciales chinas que se llama Wushu. Luego existen mil estilos diferentes. El Shuai Ciao es una de las ramas más antiguas que se conoce de las artes marciales chinas. Se trabaja mucho el cuerpo a cuerpo, y nosotros trabajamos el Shuai Chiao Baoding, que es el estilo más completo que existe, en el que hacemos especial trabajo en defensa personal. De este arte marcial vienen todas las artes de agarre orientales que conocemos como el judo o sumo. El Sanda es la parte deportiva del Kung Fu, el combate moderno. Es igual que el Kick Boxing solo que vale agarrar y tirar. Una vez que el rival está en el suelo ya no se puede pegar. Se puntúa la caída, se levanta y siguen peleando.
¿Cuáles diría que son las características que debe tener una persona para practicar artes marciales. -Todo el mundo puede hacer cualquier arte marcial. Solo hace falta paciencia y ganas. Todo lo demás va a llegar, puede tardar más o menos pero esas dos características son esenciales. Y en cuanto a la edad, para nada. Hay muchas opciones. Se puede hacer mucho trabajo interno de respiración, relajación o sacar cinturón negro con 45-50 años, por ejemplo. Una misma persona puede realizar varias modalidades, ya no solo en Kung Fu, sino en las artes marciales en general.
¿Y las principales o mayores diferencias entre los estilos?
-Cada modalidad es muy diferente. Un estilo puede estar más especializado en el agarre, otro en los golpes y otro en la fuerza. El que nosotros realizamos, que es Shuai Chiao, también tiene su deporte de Kung Fu que es lucha china, una mezcla judo y lucha. En China tiene un movimiento enorme. Ahora los dos deportes de contacto que son más conocidos son el Sanda y el Shuai Chiao.
¿Qué tienen las artes marciales que no tengan otros deportes?
-La parte deportiva me parece muy completa. Trabajas igual de izquierdas que de derechas, fuerza, resistencia, elasticidad y luego hay mucho compañerismo. A la gente le cuesta asimilar que con una persona con la que te estés pegando luego puedes estar con él comiendo y comentando la jugada. La disciplina y el respeto son muy importantes y eso se inculca desde pequeño.
Puede resultar curioso este aspecto teniendo en cuenta que hablamos de deportes de contacto.
-Mira, pongo el ejemplo de boxeo. Pocas veces verás que el aficionado se mete con el árbitro o que alguien del equipo lo haga con un rival. Pasando eso hay leyes que impiden a niños ver ese espectáculo o practicarlo porque se considera un deporte agresivo. Sin embargo, luego puede ir con el padre al fútbol y tener al lado a un energúmeno llamando de todo a quien sea, le da igual. Es un poco cómo ve la sociedad una cosa y la otra.
Para un deportista como usted que ha recorrido medio mundo, ¿le resulta difícil encontrar ayudas económicas?
-Mis campeonatos me los tomo como unas vacaciones pagadas de mi bolsillo. Para esto no hay ayudas. No pedimos un sueldo, pero sí poder ir como un equipo serio, uniformados todos igual o que un chico de 20 años, que tiene unas cualidades impresionantes, no le tenga que decir al padre dame 200 euros para ir a Madrid a participar a un campeonato de España. Esto si lo extrapolamos a otros deportes sería impensable.
¿Y cuando lee que a otros deportes se les destina una cantidad importante de diner... ?
-No sé quién pone el nivel de importancia para destinar esas ayudas. Vitoria es una ciudad muy familiar en la que puedes estar tomando unos potes en el mismo bar con Martín Fiz o un montón de deportistas. La gente que pone Vitoria en el mapa en el ámbito que sea debería tener un mínimo de ayuda. Nosotros llevamos el nombre de la ciudad bien orgullosos y nos gustaría llevarlo más grande todavía, pero se hace muy difícil y te fastidia. Al final de mucha rabia. Vitoria tiene mucha afición y buenos deportistas pese a las pocas ayudas.
¿Qué tal son las instalaciones de Vitoria en su campo?
-A nivel marcial hay buenas instalaciones. No son centros de alto rendimiento pero a nosotros nos hace falta un tatami, un espacio, y poco más. El problema viene a la hora de pedirlo. Se hace un poco duro cuando estás tú solo y tienes que encargarte de entrenar a la gente, pedir permisos, hablar con los hoteles o temas de papeleo. A veces se hace difícil tener que dar tantas vueltas.
En Vitoria tenemos ejemplos de deportistas que han tenido que salir de la ciudad para poder seguir con su progresión. ¿Se le ha pasado por la cabeza alguna vez a usted seguir el mismo camino?
-Por supuesto. Al final la familia tira mucho y considero que en Vitoria se vive muy bien. Igual no he tenido el valor de marcharme, pero hay casos en los que algunos han optado por esa opción. Es triste. Aquí hay personas que han estado en el octavo puesto del ranking mundial pero que no les paga bien o no les salen peleas. Si esas personas hubiesen estado viviendo en otro lugar tal vez habrían disputado algún título mundial y lo habrían podido ganar.