azpeitia - Estaba llamado a ser un derbi de altos vueltos para dilucidar la segunda plaza del grupo y el partrido no defraudó. Ni el Sammic ISB de Azpeitia ni el Saez Horeca -ambos se enfrentaron ayer con el mismo número de triunfos, 15, y derrotas, siete- rebajaron las expectativas y el resultado fue un partido disputado de poder a poder que se definió en los compases finales. Los alaveses llegaban a la localidad guipuzcoana tras una derrota en la prórroga ante el CB Morón, lo que supuso ceder la segunda plaza. Por lo tanto, el choque se antojaba fundamental para recuperar el cetro perdido y ante un rival determinante que, además, le ventajaba en cuanto al basket-average gracias a una cómoda victoria en Mendizorroza en el partido de ida, 71 a 84.

En este contexto, el encuentro no pudo comenzar mejor ya que los hombres de Sergio Jiménez endosaron un parcial de 0-9 en apenas cuatro minutos. Con la misma tónica defensiva que en los últimos partidos, los alaveses mantuvieron también la misma actitud ofensiva, que coincidió, como era de esperar, con la reacción de los locales, uno de los equipos más fuertes cuando juega como local. No en vano, los de Azpeitia han cedido sólo en dos encuentros en su feudo en lo que va de temporada. De esta forma, se llegó al minuto 15 con un empate a 19 en el marcador y poco después se alcanzó el descanso con una ventaja de cinco puntos a favor del Sammic (31-26), lo que confirmaba la gran igualdad existente entre ambos conjuntos. El público disfrutaba de lo lindo y lo mejor estaba aún por llegar. Sin embargo, en la reanudación se produjo una pequeña desconexión por parte del Araberri, una falta de concentración inexplicable -se perdió el control por el rebote, aumentaron las pérdidas...- que permitió a su rival abrir una brecha de 14 puntos cuando apenas se habían disputado cinco minutos del tercer cuarto (44-30). Ante semejamte losa, el partido ya se puso muy cuesta arriba. Araberri, no obstante, no se dejó llevar y continuó peleando hasta ir reduciento las distancias. Y así, a falta de 1:20 para el final, se colocaron a seis puntos (70-64), pero fue un espejismo. El Sammic anotó de tres y acabó por matar el partido (73-66).