El Barça paga la siesta

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BARCELONA: Bravo; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Jordi Alba (Min.76, Mathieu), Sergio Busquets, Rakitic (Min.72, Sergi Roberto), Iniesta, Messi, Luis Suárez y Sandro (Min.68, Munir).

DEPORTIVO: Lux; Laure, Arribas, Sidnei, Navarro, Bergantiños, Fajr, Luisinho (Min.46, Juan Domínguez), Juanfran (Min.70, Cardoso), Jonathan (Min.58, Luis Alberto) y Lucas Pérez.

Goles: 1-0: Min.38, Messi; 2-0: Min.62, Rakitic; 2-1: Min.77, Lucas Pérez; 2-2: Min.85, Bergantiños.

Árbitro: Sánchez Martínez (Comité Murciano). Mostró tarjeta amarilla a Luisinho y Laure.

Incidencias: Camp Nou, 67.194 espectadores.

Barcelona - El Barça se despidió de la Liga antes de viajar a Japón para disputar el Mundial de Clubes con un inesperado empate en el Camp Nou, ante un Deportivo (un “accidente”, calificó luego Luis Enrique, el técnico azulgrana) que comprometió el liderato de los azulgranas al igualar un partido que perdía por 2-0.

Sin dar ni una sola patada de más y en un gran segunda mitad, el conjunto gallego puso algo más de emoción a la Liga y confirmó, en el mejor escenario posible, que es uno de los equipos revelación de la temporada.

Y eso que la primera parte fue totalmente azulgrana. El Barça, eso sí, necesitó 38 minutos para doblegar la resistencia de los deportivistas. Y lo logró, cómo no, a través de Messi, que ejecutó magistralmente un libre directo desde la frontal para hacer inútil la estirada de Lux.

Hasta el 1-0, los locales lo habían intentado en media docena de aproximaciones a la meta visitante. El Depor, pese al esperado dominio local, aguantó bien la primera mitad. El árbitro anuló un gol a Luis Suárez por un riguroso fuera de juego a Messi se le escapó el segundo en una jugada personal y Rakitic por fin pudo hacer el 2-0 en un disparo seco desde la frontal.

Quedaba media hora por disputarse y el Barça parecía tener controlado el encuentro. Nada más lejos de la realidad. La entrada de Cardoso a falta de veinte minutos revolucionó el partido y Lucas Pérez, aprovechando un rechace, y Cardoso consolidaron la sorpresa en el Camp Nou.