madrid - A pesar de su discreto tamaño, la medicina alavesa continúa jugando en la Champions del deporte internacional. Ayer mismo, en el palacio de El Pardo de Madrid, y en el marco de los prestigiosos Premios Nacionales del Deporte que cada año convoca el Consejo Superior de Deportes (CSD), los especialistas alaveses Eduardo Anitua y Mikel Sánchez recibieron de manos del Rey Felipe el Premio Nacional a las Artes y las Ciencias Aplicadas al Deporte 2014. Un reconocimiento con el que el organismo que preside Miguel Cardenal quiso agradecer la “singularidad” contribución al impulso y difusión de la actividad físico-deportiva a lo largo de sus respectivas carreras. Junto a los dos galenos alaveses comparecieron en el Palacio Real el resto de galardonados de la presente edición, entre ellos figuras como Marc Márquez (Moto GP), Carolina Martín (bádminton), Carlos Sainz jr. (fórmula 1), Nairo Quintana (ciclismo) o la exjugadora de baloncesto Amaia Valdemoro.
El doctor Anitua es el impulsor del prestigioso laboratorio BTI, pionero en el desarrollo del plasma rico en factores de crecimiento, una técnica 100% autóloga que se inició en 1999, mientras que su colega Sánchez es otra eminencia en el campo de la cirugía ortopédica y medicina deportiva que continúa aplicando la técnica del plasma en lesiones tendinosas, ligamentosas o intra-articulares. Numerosos deportistas de elite como el tenista Rafa Nadal deben gran parte de sus carreras a los diagnósticos y tratamientos de estos dos médicos.
Concluida la recepción ante la familia real, ambos reivindicaron el papel preponderante de sus respectivos equipos, con los cuales comenzaron a trabajar hace 20 años en busca de la excelencia médica. “El premio es el resultado a tantos años de trabajo e investigación para ser capaces de pasar de la intuición a la evidencia”, subrayó el doctor Anitua, tremendamente satisfecho por haber colocado a Álava en la “Champions” de la medicina mundial. Su colega Sánchez, por su parte, que estuvo acompañado por seis miembros de la Unidad de Cirugía Artroscópica (UCA) del Hospital Vithas San José, también se felicitó por el galardón, “un reconocimiento al trabajo bien hecho”, advirtió antes de añadir: “El premio prestigia nuestra profesión, nuestra ciudad y es un aliciente más para seguir porque esto no puede quedar aquí. Estamos al principio de una era y no podemos levantar el pie del acelerador”. Apagados los focos y cumplidos los protocolarios saludos ante colegas y representantes de la Casa Real, los dos médicos almorzaron en Madrid antes de regresar a la capital alavesa donde, en el caso del doctor Anitua, 40 colegas extranjeros aguardaban a última hora del día su exposición sobre las últimas novedades en plasma rico en la Fundación que lleva su nombre en Armentia.