pamplona - Un final de los que crea afición, de los que levanta al público de sus asientos para despedir a los pelotaris entre aplausos, un gancho de Pablo Berasaluze para finalizar un partido disputadísimo de principio a fin.

Era el 22-21 para la pareja colorada, que luchó desde el comienzo con un gran Jon Ander Albisu atrás, que mantuvo las embestidas de Álvaro Untoria, e incluso permitió marcharse en el marcador a su pareja a mediados del encuentro (15-10).

Volvió a imponer su ley Aimar Olaizola en la cancha y consiguió igualar el marcador (16-16).

La pareja azul cogió las riendas del encuentro, un error de Albisu y un par de aciertos de Olaizola pusieron todo de cara para que el goizuetarra se metiese en una nueva final, pero Pablo Berasaluze apareció para romper con lo establecido.

Remató, arriesgó y acertó, el vizcaíno levantó al público en un final perfecto y llevó a su pareja a la final del torneo. Pablo Berasaluze y Jon Ander Albisu tendrán que esperar a esta tarde para conocer a sus rivales en la final del día 14, que se disputará en el frontón Labrit de Pamplona a partir de las 18.00 horas.

buen comienzo de irujo y barriola Juan Martínez de Irujo y Abel Barriola se juegan hoy (18.00/etb1) ante Mikel Urrutikoetxea y Mikel Beroiz la otra plaza en la final.

El dúo navarro venció en su primer encuentro del campeonato a Joseba Ezkurdia y Aitor Zubieta (22-12), dejándolos sin opciones en el torneo.

A pesar de la gran diferencia en el electrónico, Irujo y Barriola tuvieron que sufrir para sumar la victoria a su casillero. Zubieta comenzó con mucha fuerza, dominando el juego y haciendo golpear a Barriola desde muy lejos, Irujo apenas entraba en juego y Ezkurdia tenía más opciones para terminar y tuvo sus mejores minutos en la primera parte del encuentro, en la que su pareja, la azul, dominó el marcador.

En el ecuador del mismo, al fin consiguieron los colorados empatar y el devenir del partido cambió totalmente. Desde el 11 iguales, Irujo demostró una vez más su determinación en los cuadros delanteros y lo peligroso que es su saque.

A Zubieta su ímpetu le pasó factura y envió tres pelotas al colchón superior del frontón pamplonés y tuvo que sufrir con los saques de Irujo.

El de Ibero, que cuajó un final de encuentro difícil de mejorar, terminó con 5 tantos de saque y 7 tantos en juego, animando al público con sus remates y poniéndolo en pie con el definitivo 22-12.

El Labrit volvió a ser una fiesta como el resto de días del campeonato, esta tarde podrá disfrutar de otro encuentro de categoría y tras un día de descanso (en el que se jugará el desafío del vino), se llenará para ver la gran final del torneo sanferminero. - I.N.