Vitoria En el mismo Prado donde de crío soñaba con Arconada o Satrustegi relata ahora Urbina Villapún su bien llevado medio siglo de vida vinculado con el deporte, donde lo ha practicado casi todo al mismo tiempo que acompañaba a los deportistas alaveses en las ondas de la radio, las páginas del periódico o las imágenes de televisión. Periodista total. Por eso a la cita con DNA acude pertrechado como se merece su historia y deportivo a más no poder. Ünicamente canta el puro que adorna la foto, pero eso, como en su día el collar de perlas para la Thatcher, “es innegociable”.

“Muy buenas noches y saludos cordiales...” ¿Lo recuerda aún?

?Perfectamente. Una de las etapas más importantes de mi vida. La radio en estado puro y la noche de millones de aficionados al deporte acurrucados en la cama.

¿Cómo terminó un abogado radiando partidos para José María García en aquella época de Antena 3?

?Me hice ‘periodista’ en Radio Nacional de España. Alcalde, Cámara, Patxo y Vázquez me dieron un cursillo rápido de qué iba aquello. Luego puse pasión, ilusión y muchas horas. Las metí todas hasta que la dejé. Y en Antena 3, con algunos años de experiencia ya a la espalda, me encontré con García y el mejor equipo de deportes que ya haya visto y oído. Mi vocación pudo más. No me gustan todos los periodistas pero no me gusta casi ningún abogado.

Aseguran que ‘SuperGarcía’ era lo más parecido a Dios entonces... ¿Era para tanto?

?García ha sido el número uno, el mejor, el jefe más rígido y exigente. Luego, como todos los grandes, fue absorbido por su personaje y éste continuó siendo el más grande.

¿Alguna anécdota de aquellos años?

?El fichaje de Maradona por el Sevilla lo adelantó Antena 3 Radio. En Sevilla estaba Alfredo Martínez, puesto en alerta desde Madrid tras una llamada mía desde el hotel Los Lebreros. Detrás de mi compañera de mesa, a su espalda, alguien hablaba con acento argentino del Sevilla y de Maradona. “Pon el oído”, le comenté a mi chica. Lo puso y al minuto la radio ya estaba sobre la pista. Otra casualidad.

¿Qué hubo antes de eso, es decir, dónde vino usted al mundo, dónde se crió, estudió...?

?Nací y me crié en Salcedo hasta los nueve años, haciendo trastadas, jugando a vaqueros, pateando un viejo balón (yo era Sarasola y mi vecino Salbidea era Bernardo) y dejábamos el portal hecho unos zorros. Hice primaria en Rivabellosa y luego todo lo demás en el instituto Ramiro Maeztu de Vitoria donde aprendí todo lo que tenía que aprender. En la facultad de derecho de la UPV, en Donostia, me desmadré y me hice un hombre bien aprovechado.

¿De pequeño era ‘Ramontxu’ o ‘Ramoncín’?

?Ramón excepto cuando la madre ?aún lo hace? se enfadaba conmigo. Entonces era y soy ¡Joserramónnnnnn!, con mucho signo de admiración detrás (risas).

Por cierto, ¿seguidor del ‘Rey del pollo frito’ o lo suyo es otro estilo musical?

?Nada de Ramoncín, ni de aquel de la chupa de cuero ni del de ahora menos estiloso y mucho más pedante. Me quedé en los 70 y 80. En los Deep Purple, Pink Floyd, Queen, Supertramp?

¿Y qué hubo después de la etapa de la radio hasta llegar a la tele?

?Mucha, mucha radio y de todo: deportes, informativos, cultura, opinión pública. Mucho directo desde la calle. Las ruedas de prensa del alcalde José Ángel Cuerda ?lo que aprendí escuchando a ese señor?, las del Diputado General Ansola? Mi vida era puro estrés. Un día era todo eso y la semana eran siete días de curro. Enteros. Y metía crónicas en el diario ABC y en el Ya. Cuando Juanito, Martín Fiz y el Baskonia salían también en los periódicos nacionales. Entonces era Urbina o era Unzurrunzaga.

¿Quién tuvo la culpa de ponerle delante de una cámara?

?Gaizka Uraga, un chaval de Bilbao, amigo de un amigo mío de aquí, Natxo Manso. Yo andaba algo fuera y me metí en la boca del lobo. Ellos fueron los que me abrieron la puerta de la tele y yo un inconsciente y un sobreviviente, nunca un superviviente.

Aún hay quien le recuerda por aquel carrusel deportivo local de los domingos en aquellos lejanos años de Canal Gasteiz...

?¡Joder el Marathon Match! Cinco horas en directo todos los domingos. Los pasábamos en compañía el cuadro de actores más atrevido, trabajador y profesional que nunca he visto. Txema, Aitor, Sergio, Raquel, Esti, Antonio, Pedro, Alberto y Rodrigo. También Alvaro, Julio, Nuria, Iagoba?. Unos locos capaces de crear algo digno en las condiciones menos favorables del mundo. Hacíamos una televisión de pueblo porque éramos periodistas de pueblo, pero todo muy digno, muy trabajado y muy profesional. Y lo pasábamos de miedo. Y también pasábamos mucho de eso, mucho miedo.

Deportivamente siempre ha sido muy activo. Fútbol, tenis, pádel, pelota... ¿Con cuál se queda?

?De niño era fútbol en El Prado. Luego vino el tenis. En la Uni fútbol también y más tenis. Pádel a la vuelta activa en pantalón corto y paleta argentina en trinquete con los 50 tacos cumplidos, de blanco y gerriko y con dos “cojones”. He ganado títulos provinciales al tenis y me molían en cuanto salía de Alava. Al pádel me pego con los jóvenes y con la selección vasca ya tenemos un título de España. Y con la argentina, en paleta argentina, me atrevo a todo. Y en medio de todos, la montaña de cuando en cuando.

Nos cuentan de usted: gran aficionado al puro y la buena sobremesa. Eso no casa bien con el deporte...

?No trago. Bueno, en realidad trago con todo menos con el humo del puro. Y ambos casan. Tras una buena comida, un buen puro y pocas palabras, algún órdago y basta. Y antes un buen partido de lo que sea para hacer hambre.

¿Qué deportista marcó su infancia y cuál hoy?

?Sarasola, Iribar, Arkonada y Satrustegi. De los de hoy me quedo con Xavi y Nadal.

¿Cree usted qué puede ser ejemplo de algo en esta vida?

?No creo.

Durante un tiempo también fue asesor de Comunicación en el Ayuntamiento cuando gobernaba el PP. ¿Se arrepiente, no ya del partido, sino del entorno que vivió?

?En absoluto. Trabajé con gente capaz, muy inteligente y buena. Claro que también había de todo lo contrario, como en la oposición. No es difícil defender una gestión. Está “tirao”. Todos hacen cosas bien hechas y todos se equivocan. Con lo bueno se trata de apuntar en el “habe” y venderlo y con lo menos bueno, disimular y maquillar un poco. Desde la oposición no hubiera sido capaz. Nunca me ha gustado dar por dar. De estrategia y maquiavelismo ando ralo. No me gusta la política, soy más de pueblos que de estados o naciones pero es necesaria, y la municipal, la más próxima, mas controlable. Y de eso se trata, de controlarlos a todos. No viene mal un aire fresco en las instituciones: de personas y de ideas.

¿Estando ahí dentro cambió su visión de la cosa política para mejor o para lo contrario?

?A ver, en los pueblos y ciudades creo que la política, al ser más cercana ?el contacto con el mandamás es más próximo y directo? aprendes a querer a casi todos por igual. Dentro ves lo que trabajan, las horas que andan preocupados y distingues muy claro quien está por estar, quién por vocación y quién porque igual no vale para otro sitio.

¿Y hasta cuándo tiene ganas de seguir trabajando, porque las tiene, o no?

?No veo yo el día de dejar de hacerlo y ojalá no me cueste encontrarlo nunca. Por tres motivos: mis dos hijas y porque estoy acostumbrado a pagar mis facturas.

Fantaseando un poco. ¿Qué haría ahora mismo con un millón de euros en el banco?

?No es mucho eso para lo que tengo pensado en caso de que fuera mucho más, ¡pero viviría de puta madre, seguro!

Perdone el atrevimiento, ¿pero ya ha pensado cómo quiere que se le recuerde?

?Lo que tenía que hacer, lo importante, ya lo tengo hecho, pero ahora bien, me quedan aún tantas cosas por hacer... No quiero que hablen bien cuando me vaya, eso lo hacen de cualquiera. Quiero que hablen y piensen bien de mí ahora en vida.

Y la última respuesta para usted, para que diga lo que le dé la gana.

?Estas páginas se la hacéis a cualquiera, ¡oxtia! ¡Me encanta decir la oxtia! (risas). l

Nombre. José Ramón

Urbina Villapún.

DNI. 50 años, Salcedo (Álava).

Soy hijo de... Eloy y Adelaida.

Estado civil. En la reserva.

Formación. Estudios universitarios y subiendo.

Trabajo actual. Comunicación

y RREE. Trayectoria profesional. Larga y completándose. He formado parte de proyectos de prensa, radio,

televisión, máquinas, formación y gestión en general.

Una película. El Padrino (II parte).

Un actor. Dos: Landa y De Niro.

Una actriz. Otras dos: Katharine Hepburn y Whitney Paltrow.

Un libro. ‘Siddhartha’, de Hesse

Una comida. Paella.

Una bebida. Cerveza y Coca Cola.

Un lugar para perderse. El

salón de mi casa.

Una virtud. Aprender

a dominarme

Un defecto. La ira.

Un vicio. Un Habano... y

fumármelo en silencio.

Otro deporte. ¿Cómo que otro? Pádel para practicar, fútbol para ver y pelota por pelotas.

Una ciudad para vivir. Jerusalen.

Un grupo de música. David Bowie y Deep Purple.

Una canción. ‘Heroes’, de Bowie, y ‘Mcgee’, de Janis Joplin.

Un viaje por hacer. A ninguna parte, me encantaría...

Le gustaría aprender... Euskera y manejar la guitarra eléctrica.

Un programa de la tele. LND y

Salvados, el de Évole.

Un nombre de mujer. Ahí le doy

otros dos, María y Goretti.

Un nombre de hombre. Joseba.

Un color. Azul.

Un deportista. Rafa Nadal y Xabi.

Una pasión. La de Cristo.

Un sueño por cumplir. Ninguno y todos.