Sevilla - La selección española buscará dar un gran paso hacia la Eurocopa de 2016 con un triunfo (20.45 horas, ‘La 1’) en el histórico talismán Sánchez Pizjuán de Sevilla, donde recibirá a una peligrosa Ucrania, con la que está empatada a puntos en el Grupo C de la fase de clasificación.
Con el recuerdo todavía de la derrota ante Eslovaquia en el mes de octubre (2-1), la actual bicampeona de Europa sabe que no puede fallar ante uno de sus rivales directos para no complicarse un billete para la defensa de su título, que aún no está en riesgo porque a Francia viajan los dos primeros de cada grupo, e incluso hay posibilidades de hacerlo siendo tercero, vía una repesca.
De todos modos, jugando en casa, la Roja está más obligada aún a no cometer un nuevo traspié para seguir cerca de una Eslovaquia que debería sacar los tres puntos ante Luxemburgo. Los de Vicente del Bosque llevan 29 partidos oficiales invictos en suelo nacional desde que Grecia ganase en La Romareda en junio de 2003, aunque en la fase de clasificación para el Mundial de Brasil, se dejó dos empates, en el Vicente Calderón ante Francia (1-1) y el sorprendente en El Molinón ante Finlandia (1-1).
El choque ante Ucrania, un rival incómodo y con el que España está empatada a nueve puntos y con una derrota también ante Eslovaquia, aunque en su caso fue en su estadio, se presenta como un nuevo examen para ver la rehabilitación que está llevando a cabo la Roja en sus filas y en su juego desde el Mundial de Brasil.
Del Bosque tiene prácticamente a todas sus piezas disponibles para este partido, con la única baja una vez más del hispano-brasileño Diego Costa, que parece ‘gafado’, y del que estaba siendo su sustituto, el valencianista Paco Alcácer, que no está a tope tras superar una lesión.
Esto parece que dará la oportunidad a uno de los delanteros más entonados del momento, Álvaro Morata, que se ha convertido en indiscutible en la Juventus y que ha pasado de tener que marcharse del Real Madrid a ganarse un sitio en la selección. El madrileño se perfila como la mejor opción para liderar el ataque de un equipo por encima de la opción de un falso 9. - E.P.