Pamplona - La junta directiva de Archanco, o al menos alguno de sus miembros, o bien Ángel Vizcay, que era por entonces el gerente sin formar parte de la directiva, sacaron en metálico, a través de ventanilla o en reintegros en cajeros, hasta 1.440.000 euros en seis meses con destino a la sociedad Flefield, una firma opaca ubicada en el paraíso fiscal de Madeira asimilable a un fondo de inversiones.

Más allá de que la relación de Flefield con el club rojillo es totalmente desconocida por ahora, salvo que Archanco pueda acreditar lo contrario algún día, lo cierto es que en la documentación que obra ya en poder del juez de Instrucción número 2 de Pamplona figura que el club navarro y esta sociedad de intermediarios firmaron un contrato (sin que aparezcan nombres de los firmantes ni por una ni por otra parte) en el verano de 2013 para realizar labores de scouting (seguimiento y captación de futbolistas jóvenes) y consulting futbolístico durante la temporada 2013-4. Más allá de que nadie cree que Osasuna haya destinado una cantidad semejante a este concepto ni sumando todos los años de su historia, el hecho relevante es que pese a que, por parte del club, se aportó un contrato fechado en verano de 2013 resulta que el primer pago no se efectuó hasta enero de 2014. Y lo que es más relevante, en el libro de cuentas de Osasuna figura que Flefield emitió 3 facturas por estos conceptos, el 10 de enero, el 25 de marzo y el 25 de junio, respectivamente, por importes de 675.000 euros la primera y 445.000 euros las otras dos facturas, esto es, un montante de 1.565.000 euros.

Pero el caso es que la primera factura, de 675.000, aparece en el libro de cuentas del club disgregada en dos pagos, siendo el segundo de ellos de 375.000 euros. Este consta contabilizado como que se efectuó el 10 de mayo de 2014, es decir, en sábado y en la víspera de jugar el duelo decisivo por la permanencia contra el Espanyol. El empate en Cornellá se investiga también por su relación con apuestas en el extranjero. Aquello fue una semana después de jugar contra el Celta en casa y de que el Betis ganara al Valladolid, partidos todos ellos que a estas alturas están siendo mirados con lupa. Por tanto, para los que ya han tenido oportunidad de revisar la auditoría rojilla, las operaciones de reintegros en efectivo a Flefield adquieren especial relevancia si se ponen en relación con las fechas que se producen.

Conviene saber también que en las cuentas de Osasuna, los dos últimos pagos a la sociedad portuguesa se produjeron ya en junio, es decir cuando Archanco estaba preparando las maletas para dejar el club y supuestamente trabajando en un plan de viabilidad. Fuentes del club dicen que no saben si trabajó en ello, “pero desde luego lo que no dejó en su despacho fue ni un papel. Todos los archivadores del despacho del presidente estaban limpios de polvo y paja”, cuentan. En la auditoría no consta trabajo alguno realizado por esa empresa Flefield ubicada en la isla portuguesa. “Llama la atención que un servicio por el que se ha pagado 1,44 millones no haya dejado algún tipo de información con la que verificar su efectiva prestación”, reflejan los auditores.