El tenista español Rafa Nadal, número tres del mundo, afrontaba esta madrugada su partido de octavos de final en la séptima jornada del Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada, ante el sudafricano Kevin Anderson.

El balear desterró las dudas motivadas por el estado físico evidenciado ante el estadounidense Tim Smyczek venciendo el viernes al israelí Dudi Sela en tres sets (6-1, 6-0, 7-5), en un duelo en el que exhibió una imagen mucho mejor.

Su rival en la Rod Laver Arena es el sudafricano Kevin Anderson, decimocuarto favorito y que eliminó el viernes al francés Richard Gasquet (6-4, 7-6(3), 7-6(6)). En el único precedente de enfrentamiento entre ambos, Nadal se impuso en los octavos de final del Masters 1000 de Toronto 2010 (6-2, 7-6(6)).

Por su parte, el escocés Andy Murray, sexta raqueta mundial, se cita con el búlgaro Grigor Dimitrov, décimo favorito del torneo oceánico, por un puesto en cuartos de final. En la jornada de ayer, David Ferrer venció en una dura batalla al francés Gilles Simon y llegó a los octavos de final del Abierto de Australia por quinto año consecutivo, pero Fernando Verdasco dejó escapar una gran ocasión en el primer set ante Novak Djokovic y luego el serbio no tuvo piedad.

Con su victoria y las de Feliciano López, Guillermo García-López, habrá cuatro españoles en octavos (Rafael Nadal incluido) y una chica, Garbiñe Muguruza.

Ferrer desperdició cuatro ocasiones para cerrar el partido con su servicio, y al final superó a Simon por 6-2, 7-5, 5-7 y 7-6 (4) a la tercera oportunidad, después de tres horas y 37 minutos para dejar sus enfrentamientos en 6-2 para el de Javea.

“Ha sido una batalla, espero que el público haya disfrutado, yo también porque al final he ganado. Ahora estoy feliz pero hace dos minutos lo estaba pasando mal. Gilles nunca se da por vencido. Ahora no quiero hablar de Nishikori”, su próximo rival, “solo descansar”, dijo Ferrer en la Margaret Cour Arena. Guillermo García López también accedió a octavos a costa del canadiense Vasek Pospisil, número 60 del ranking, al que derrotó en tres sets (6-2, 6-4, 6-4), y se medirá con el suizo Stanislas Wawrinka en la siguiente ronda.

Feliciano, por su parte, derrotó a Janowicz. “El partido de hoy es una buena preparación para jugar contra Raonic. A nivel de confianza, ganar es lo único que cuenta. Son jugadores un poco parecidos, con algunas pequeñas diferencias. Con Milos será un partido muy igualado. Hemos jugado varias veces y será un partido justo. Si logro alcanzar mi nivel seguro que tendré mi oportunidad. Ojalá pueda hacerlo bien y poner el partido en situaciones favorables”, señaló tras vencer al al polaco Jerzy Janowicz (7-6(6), 6-4, 7-6(3)) en tercera ronda.

Garbiñe Muguruza fue la primera de todos en lograr los octavos ayer, y al vencer a la suiza Timea Bacsinszky, por 6-3, 4-6 y 6-0 se medirá por tercera vez y segunda en este torneo con la estadounidense Serena Williams. Serena se hizo con la victoria después de batallar con la ucraniana Elina Svitolina, por 4-6, 6-2 y 6-0. Será una repetición del duelo que mantuvieron en 2013 en estas mismas pistas y del que tuvo lugar en Roland Garros el año pasado. El primero para Serena (6-2 y 6-0) y el segundo para la discípula de Alejo Mancisidor (6-2 y 6-2).

“No necesito pensar en nada, pienso que así funciona”, dijo Garbiñe en pista cuando le fue preguntado sobre su plan contra Serena.

“Cuando jugué contra Serena hace dos años, no tenia la experiencia que tengo ahora, y aunque pareció una paliza, para mi no fue tan 6-0 y 6-2”, repasó Muguruza.

“El año pasado entré con las ideas más claras, no pensando que era invencible”, recordó sobre su victoria en París. “Si, han sido dos partidos diferentes, pero cada uno es como salga”, declaró Garbiñe que, de ganar otra vez, igualaría los cuartos de final de Roland Garros el pasado año, su mejor marca en el Grand Slam. - Efe

En uno de los breves descansos del Djokovic-Verdasco, un aficionado pidió en matrimonio a su pareja, ella dijo sí y ambos se besaron y saludaron al público.