En 2009, un chaval eritreo de solo 20 años y 1,84 metros de estatura se plantó en el Hipódromo de Donostia con una buena trayectoria juvenil de cross a sus espaldas, y el aval de haber participado (fue 34º) en los 10.000 metros de los Juegos Olímpicos de Pekín. Teklemariam Medhin solventó la incógnita adjudicándose la prueba de la capital guipuzcoana, e iniciando una historia que va camino de convertirse en leyenda. El atleta africano repitió triunfo en 2013, de nuevo después de correr el diez mil olímpico (fue séptimo en Londres), y ayer buscaba su tercera victoria en las campas de Zubieta tras unos meses sin prodigarse en exceso en la competición. La ausencia de grandes campeonatos el pasado verano, unida al reciente éxito en Amorebieta de su principal rival, el ugandés Toroitich, convertía el rendimiento de Medhin, como en 2009, en una gran interrogante. Pero el eritreo la resolvió exactamente igual que hace seis años. Restaban dos kilómetros de carrera, una vuelta al trazado, y la victoria ya era cosa de dos, una lucha entre los dos favoritos mencionados. Coincidiendo con el penúltimo paso por meta, Medhin aceleró y nadie pudo seguirle. Toroitich se quedó clavado. El jovencísimo keniano Elvis Cheboi había sucumbido en el giro anterior. Y poco antes lo había hecho Javi Guerra, a la postre cuarto.
El segoviano fue el mejor de los mortales, pero no el más valiente, título que recayó en el quinto clasificado, Iván Fernández. Quizás siguiendo una estrategia de carrera premeditada, o quizás también equivocado al intentar neutralizar a un atleta popular que buscó su minuto de gloria, el alavés abrió hueco respecto al resto del pelotón desde los primeros metros de prueba.
El liderato de Fernández duró cerca de tres kilómetros. Completó el primer mil en menos de tres minutos y, con rostro concentrado, se llevó la ovación del público en el primer paso por meta. Parecía que los africanos, a los mandos del grupo perseguidor, iban a sufrir para cazarle, pero finalmente lo hicieron bien pronto. Para conseguirlo descolgaron a Carles Castillejo, hicieron lo propio después de la reabsorción con el alavés, y terminaron eliminando a Javi Guerra antes de que se desencadenaran las hostilidades entre ellos. Medhin fue el más fuerte y, además de adjudicarse el cross donostiarra, lanzó un aviso a navegantes de cara al Mundial de la disciplina el próximo mes de marzo.
Antes de la prueba masculina, la femenina se había desarrollado de forma muy distinta. Entre las mujeres no hubo nadie como Iván Fernández que acelerara el ritmo desde un inicio, por lo que la carrera se desarrolló en un principio a ritmos muy pausados, superando los cuatro minutos por kilómetro. Esto propició que el grupo cabecero resultara muy nutrido hasta mediada la competición, y a que el público disfrutara viendo en él a la local Maite Maiora.
Rumbo al paso por el cuatro mil, las grandes favoritas, las kenianas Betsy Saina y Magdalene Masai, decidieron que había llegado el momento de ponerse a correr, y no tardaron en quedarse solas. Con la abundante lluvia caída por la noche, el circuito presentaba un estado bastante pesado, algo que, sobre el papel, beneficiaba a Masai, una atleta más experimentada en cross que su compatriota Saina, de mayor predilección por la ruta. Sin embargo, la lógica no se impuso en esta ocasión, y el interesante mano a mano final se saldó en favor de la propia Saina.
Prueba masculina
1. Teklemariam Medhin30:54
2. Timothy Toroitich31:05
3. Elvis Cheboi31:33
4. Javi Guerra31:45
5. Iván Fernández32:13
Prueba femenina
1. Betsy Saina23:19
2. Magdalene Masai23:22
3. Lidia Rodríguez23:55
4. Diana Martín23:58
5. Verónica Pérez24:31
Veteranos
Sergio Román13:39
Nidia Zulma Borget9:50
Juveniles
Lahbid Saidi19:14
Jone Zabaleta16:47
Juniors
Ossama Ifraj19:08
Inés Zugasti17:13
Cadetes
Martín Zugasti13:40
María Lasa7:55