PARÍS. "Se comunica con los ojos, sin poder hablar, pero por lo menos se comunica con su mujer y con sus hijos", explicó Streiff en declaraciones hoy al canal francés de televisión "BFM TV".
El piloto francés, que dijo haber obtenido esas informaciones del médico Gérard Saillant, y también estar en contacto con la esposa de Schumacher, Corinna, en otra entrevista a "Le Parisien" precisó que el deportista, gravemente herido cuando esquiaba en los Alpes franceses, "por lo menos empieza a reconocer a los suyos, a su mujer y a sus hijos, pero tiene grandes problemas de memoria".
"Va mejor, aunque las secuelas son muy duras", indicó antes de recordar que Schumacher está consciente, pero no ha recuperado la palabra.
El campeón alemán de Fórmula Uno estuvo hospitalizado durante más de ocho meses tras el siniestro sufrido a finales de diciembre de 2013 en la estación de esquí de Meribel. Desde comienzos de septiembre se encuentra en su casa de Gland en Suiza y ha habido pocas noticias sobre la evolución de su estado de salud.
Streiff, que es tetrapléjico a causa de un accidente con su bólido en 1989, comentó que ese traslado se justifica en parte para que pueda "tratar de recuperar la memoria mucho más rápido en un entorno familiar".
Preguntado sobre si podrá recuperar la motricidad, indicó que "por ahora, es muy limitada. El paso de la cama a la silla de ruedas ya es muy difícil. El cuerpo tiene que reacostumbrarse a la posición sentada. A mí me costó más de un año. Michael empieza a trabajar en eso".
"A largo plazo y en un escenario ideal, podrá esperar un día caminar con muletas porque su médula espinal no ha resultado dañada. Pero no se puede decir nada, ni prever. Sobre el uso de la voz, mucho dependerá de la reeducación. Cada caso es particular", añadió.