BILBAO - Juan Martínez de Irujo pisó ayer por última vez el frontón Bizkaia de Bilbao antes de conocer el material dispuesto por las empresas en la liturgia con el cestaño propuesta para mañana, a partir de las 12.00 horas en la cancha vizcaina. El delantero se ejercitó junto a Joseba Ezkurdia y los técnicos Jokin Etxaniz y Martín Alustiza en el tapete negro del emplazamiento vizcaino durante “al menos una hora y veinte”, según manifestó el pelotari de Ibero, quien se decantó por entrenar junto al voleísta de Arbizu porque “le da mucha velocidad a la pelota y te hace moverte mucho en la cancha. Te activa”. Así, tras un calentamiento largo, embocaron la final del Cuatro y Medio del domingo frente a Aimar Olaizola con un “partidillo, unos saques, unos remates y un poco de técnica”.
Revela Martínez de Irujo que ya hasta la fecha de la final “solo tocaré pelota el día de la elección, en la que tengo intención de estar al menos quince o veinte minutos para entrar en calor”. De trabajo físico, por otra parte, el guion establece apenas un trabajo de carrera continua y ligereza para “descargar el cuerpo para la final”. “Están todos los ingredientes para que salga un buen partido, pero todo depende de cómo saltemos a la cancha cuando el Bizkaia esté a reventar”, manifiesta el hombre franquicia de la promotora Aspe.
Así las cosas, Juan Martínez de Irujo, que la semana pasada comentó estar con buenas sensaciones, argumenta ya que “empiezan los primeros cosquilleos en la tripa”. “Por los nervios o lo que sea uno se va del frontón con sensación de que podía haber hecho más, pero estoy con ganas de jugar, con ganas de que llegue la final”, apostilla el delantero navarro. Aimar Olaizola, por su parte, hará hoy su última sesión de entrenamiento en el frontón Bizkaia de Bilbao antes de la disputa por la txapela. - I. G. Vico