bracelona. El socio barcelonista Jordi Cases, que ha interpuesto una querella contra el ya expresidente del Barcelona Sandro Rosell, ha informado de que se va a tomar "un fin de semana de reflexión" para decidir si amplía la demanda al que ahora es mandatario de la entidad, Josep Maria Bartomeu.
Debido a que los diversos contratos que se han firmado por parte del Barça y de Neymar cuentan también con la firma de Bartomeu, y del vicepresidente de economía, Javier Faus, el querellante contempla la posibilidad de ampliar la querella a estos.
Cases dijo que estaba a la espera de la comparecencia de Bartomeu para conocer la posición del nuevo presidente, aunque se sorprendió de que quiera cumplir el mandato, que expira el 30 de junio del 2016. "Voy a reflexionar este fin de semana y el domingo hablaré con mi abogado (Felipe Izquierdo). La decisión final será mía, solo mía", garantizó el socio, que antes de presentar la querella, formalizó un voto de censura contra la directiva de Rosell, que se consumió en un día, justo cuando recogió las papeletas, y finalmente la retiró.
El socio azulgrana aseguró que vive unos momentos de mucha tensión por los acontecimientos que se están produciendo, y que empieza a estar sobrepasado, especialmente por ver medios de comunicación en las cercanías de su casa o de su negocio, como ha pasado estos últimos días. "Estoy un poco cansado de todo. Este fin de semana acordaré qué hacer. Tengo tres opciones: seguir el proceso que está en marcha (la querella ha sido admitida a trámite por el juez Pablo Ruz de la Audiencia Nacional), ampliar la querella a Bartomeu y a Faus o retirarla", apuntó.
nueve denuncias Por su parte, según confirmaron ayer fuentes de la Policía, la familia de Sandro Rosell denunció nueve veces ante los Mossos d'Esquadra que había sido víctima de amenazas y agresiones, razón principal que esgrimió el expresidente para dejar definitivamente su cargo.