Vitoria. En unos tiempos en los que el ciclismo parece herido de muerte por los numerosos problemas que le atacan desde hace años, todavía siguen existiendo irreductibles amantes del siempre espectacular deporte de las dos ruedas que no están dispuestos a dejarlo en la estacada. Están convencidos de que tiene presente y, lo que es todavía bastante más importante, mucho futuro y por ello apuestan aun a costa de asumir algunos riesgos. Si el anunciado desembarco del piloto de Fórmula 1 Fernando Alonso con una escuadra del máximo nivel ha supuesto una enorme bombona de oxígeno en el campo profesional, algo similar -salvaguardando las lógicas distancias- va a suceder en Álava.
Porque en el territorio histórico está a punto de ver la luz un nuevo y ambicioso proyecto que, por el momento, tendrá como escenario de sus actuaciones el campo aficionado. Se trata del equipo Zirauna que, de la mano del exprofesional Gorka Beloki, va a aumentar la importante estructura con la que ya cuenta en la actualidad. Tras comenzar a trabajar en la idea hace varios años, el proyecto ha ido dando pequeños pasos en la siempre complicada búsqueda de la consolidación.
De esta manera, en estos momentos cuenta con más de medio centenar de jóvenes ciclistas (de ambos sexos) repartidos entre sus diferentes equipos -escuelas, cadetes y juveniles-. Una capacidad de movilización que le ha convertido en la referencia del ciclismo alavés de categorías inferiores, que ha visto cómo en los últimos años ha ido perdiendo la fuerza y el apoyo que provocó hace no demasiado que pudieran florecer grandes estrellas -a nivel internacional incluso- de este deporte.
Lejos de darse por satisfechos con lo conseguido, los impulsores del proyecto quieren ir todavía más allá y por ello han fijado este recién iniciado 2014 como el año de su desembarco en el campo profesional. Con ello, dotarán de un escalón más a su particular pirámide permitiendo que un niño entre en la misma con seis años y no tenga que abandonarla hasta los 26, pudiendo disfrutar de hasta dos décadas de ciclismo en sus diferentes etapas.
Una opción que representa ahora mismo un oasis dentro del desértico paisaje alavés de la especialidad. Porque el declive ha sido más que evidente a lo largo de los ejercicios anteriores. Desde la desaparición, hace ya muchos años, del Ruta de Europa, únicamente el Naturgas ha ondeado la bandera del ciclismo provincial. Aunque, todo hay que decirlo, de una manera un tanto especial. Si bien es verdad que su licencia es alavesa, no lo es menos que sus órganos de decisión siempre han estado -y están- en Bizkaia bajo el manto protector del ya desaparecido Euskaltel. De hecho, esta próxima temporada únicamente contará con un corredor alavés en sus filas.
Un escenario de futuro nada esperanzador y que el Zirauna pretende comenzar a enmendar con su ambicioso proyecto. Porque si algo tienen claro los responsables del equipo es que el ciclismo alavés y sus practicantes debe ser la principal seña de identidad del mismo, permitiendo que los más pequeños que integran la base se vean reflejados en los que ocupan la punta de la pirámide. Como consecuencia, cerca de la mitad de los dieciséis ciclistas que integrarán la primera plantilla que tendrán a sus órdenes Gorka Beloki y José Luis Urdiain (ambos con experiencia anterior en la dirección en el Lizarte) serán provenientes de este territorio histórico. Así, hombres como Imanol Estévez o Aitor Morales, ya con una trayectoria destacada en la categoría, serán los abanderados de la escuadra.
Un grupo que ha comenzado ya con el duro trabajo de entrenamientos de la época invernal con la vista puesta en el cada vez más cercano inicio de la temporada. Pese a su condición de debutante, el Zirauna apuesta por completar un calendario ambicioso que incluirá las pruebas del Vasco-Navarro, las carreras de la Copa de España y también competiciones en el extranjero. De hecho, está previsto que el estreno oficial del maillot se lleve a cabo a mediados del próximo mes de febrero en Francia, tomando parte en La Ronde du Pays Basque.