las reacciones de los partidos políticos e instituciones al anuncio de la apertura de un expediente a siete clubes de fútbol, entre ellos Osasuna, coinciden en la cautela y el asombro por la incoación del procedimiento.

Los portavoces de los grupos parlamentarios navarros se expresaron ayer en esa línea en la Cadena Ser, entre la sorpresa y, en algunos casos, el estupor. Carlos García Adanero (UPN) indicó que la situación que se plantea ahora es inusual. "Osasuna continuó como club deportivo porque en aquel momento estaba saneado. Que eso sea un problema no es lo más normal", dijo.

Koldo Amezketa (Bildu) fue contundente a la hora de expresar la contradicción del procedimiento. "Ahora resulta que aquellos que no recibieron ayudas para poderse sanear son los malos de la película, parece el mundo al revés", afirmó.

Txentxo Jiménez (Aralar) tiró por el lado de la defensa del modelo del club deportivo. "Prefiero un club que sea de los socios que de ciertos accionistas". Y añadió: "Los impuestos los tiene que pagar todo hijo de vecino y de ahí no se puede librar ni Osasuna ni nadie".

Pedro Rascón (PSN) se mantuvo en la misma línea argumental. "Me gusta más lo que es un club que una sociedad anónima. Los impuestos hay que pagarlos, las obligaciones tributarias son de todos", indicó.

los otros casos Josu Urrutia, el presidente del Athletic Club -uno de los clubes implicados en el expediente-, por su parte, compareció ayer en conferencia de prensa para afirmar que el club "históricamente ha cumplido la ley, y ahora es así también" y anunció que en ningún caso apoyaría que el club se convirtiera en sociedad anónima deportiva. Preguntado si teme una multa europea, Urrutia dijo que "no creo que deba haber una multa, actuamos históricamente conforme a la ley. No me he planteado una reconversión en sociedad anónima; el club es de los socios, y no creo que esté en cuestión el modelo. Si lo estuviera, nosotros vamos a pelear porque este club siga siendo de los socios". Respecto al expediente por la construcción de San Mamés, "lo único que sabemos es que ha habido alguna petición de información, que las diferentes instituciones ya la han transmitido y que también están tranquilos". El Gobierno valenciano, otro de los protagonistas de la polémica, dijo que defenderá ante la Unión Europea que los avales concedidos al Valencia, el Hércules y el Elche "no distorsionaron" la competencia del mercado futbolístico. "Nosotros vamos a dar la documentación, los argumentos y las justificaciones oportunas para defender nuestra actuación en aquel momento", dijo el conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues. "Esos apoyos fueron aplaudidos por toda la sociedad valenciana, dado el carácter significativo de los clubes de fútbol".

Los grupos parlamentarios del Congreso indicaron que confían en que se aclare este asunto. Solo Unión, Progreso y Democracia (UPyD), por boca de Rosa Díez, ofreció argumentos distintos y defendió que la Comisión Europea investigue si cree que hay materia para ello, y no cree que deban ser protegidos como Marca España pues se trata de personas jurídicas independientes. "Los clubes de fútbol no son marca España, son empresas, son sociedades anónimas", dijo con evidente falta de conocimiento.