Duración: 3 horas y 49 minutos.

59%Primer servicio 62%

3Puntos directos de saque4

4Dobles faltas4

53Errores no forzados29

61%Puntos ganados primer servicio 61%

40%Puntos ganados segundo servicio 48%

42Puntos ganadores 38

42%Puntos ganados al resto 46%

7/10Roturas conseguidas 9/17

23/32Puntos en la red 8/14

205Servicio más rápido (Km/h) 207

187Media primer servicio (Km/h) 186

149Media segundo servicio (Km/h)143

116Puntos totales 124

londres. Novak Djokovic sigue siendo el Maestro. El número 2 del mundo se impuso en el O2 Arena de Londres por segundo año consecutivo y dejó a Rafa Nadal sin el único título importante que le falta, el que completaría su excelso palmarés. El balear acaba "la temporada más emotiva de mi carrera", según afirmó en la entrega de trofeos, la mejor, habría que afirmar sin ninguna duda, como número 1, pero Djokovic va a ser su sombra permanente. El serbio se rehizo a la derrota en la final del US Open como solo lo hacen los elegidos y su cierre de año ha sido impecable, como su final de ayer.

En este tenis bipolar de 2013, en el que todos los torneos de Grand Slam y Masters 1000 han caído del lado de Nadal o Djokovic, salvo Miami y Wimbledon que fueron para el ahora lesionado Murray, los dos reyes del circuito saben que para ganar al otro tienen que jugar a un nivel superlativo que es lo que hizo ayer el de Belgrado. Todo lo que intentó le salió mientras que Nadal cometió muchos más errores de lo habitual, sobre todo con su golpe de derecha que conectó siempre unas décimas tarde porque la bola le atropellaba.

Djokovic puso mucha presión con el resto y, salvo los tres juegos que el balear encadenó para igualar a 3 en el primer set, Nadal siempre fue a remolque. El serbio seguía su plan con absoluta precisión, con la pelota muy cerca de la línea de fondo, y al de Manacor solo le quedaba resistirse a la derrota a la espera de que su rival dejara un resquicio de duda. Salvó un pelota de set en el noveno juego del segundo set, otro en el décimo, en sus mejores minutos del partido, pero Djokovic llevaba demasiada ventaja. Con una derecha fallada por Nadal, otra más, se acabó una disputa que supo a poco por la superioridad del serbio en la superficie que mejor le va. No en vano, acumula 22 victorias consecutivas bajo techo en este final de año y salió por segundo año consecutivo del O2 Arena sin perder ni uno de los cinco partidos.

A Novak Djokovic le espera aún este fin de semana la final de la Copa Davis ante la República Checa antes de continuar con el cambio de año en el mano a mano con Rafa Nadal. El serbio defenderá en enero en Australia 2.000 puntos, más de los que tendrá que proteger el balear en febrero y marzo. Este rivalidad eterna, que ayer vio la decimoséptima victoria de Djokovic, promete más capítulos de altísimo nivel, sobre todo a partir de la próxima primavera. Los dos mejores doblan en puntos al tercero en un ranking que dominan con mano de hierro y una mentalidad a prueba de bomba. Pero el Maestro, el que dictó la última lección, fue Novak Djokovic.

verdasco-marrero, campeones La pareja que forman el madrileño y el canario se proclamó campeona contra pronóstico de la Copa de Maestros de dobles al derrotar al mejor dúo del mundo, los hermanos estadounidenses Mike y Bob Bryan. En un partido con solo una rotura de servicio, Fernando Verdasco y David Marrero se llevaron el primer set por 7-5 y cedieron el segundo en el tie-break por 7-6. El duelo se resolvió en el super tie-break que cayó del lado de los españoles por 10-7 para suceder en el palmarés a Marcel Granollers y Marc López.