REAL MADRID Diego López; Carvajal, Pepe, Varane, Arbeloa; Xabi Alonso (Illarra, m.70), Khedira (Isco, m.77), Modric; Cristiano, Bale y Benzema (Morata, m.83).
REAL SOCIEDAD Bravo; Carlos Martínez (Ansotegi, m.59), Mikel González, Íñigo Martínez, José Ángel; Bergara, Elustondo (Zurutuza, m.46); Prieto, Vela, Griezmann; y Seferovic (De la Bella, m.46).
Goles 1-0, m.12: Cristiano. 2-0, m.18: Benzema. 3-0, m.27: Cristiano de penalti. 4-0, m.36: Khedira. 4-1, m.61: Griezmann. 5-1, m.77: Cristiano.
Árbitro Martínez Munuera (valenciano). Amonestó a Pepe (29) y Arbeloa (53) por el Real Madrid; y a Mikel (76) por la Real.
Estadio Santiago Bernabéu. 77.427 esp.
MADRID. El Real Madrid dejó sus mejores minutos de la temporada, pasando por encima de una Real Sociedad superada y cansada de su esfuerzo en la Liga de Campeones, a la que goleó desatando su versión arrolladora desde la figura de Xabi Alonso, que aporta el equilibrio que necesitaba Carlo Ancelotti para despegar (5-1). La dimensión de la figura de Xabi Alonso se ha comprobado en su ausencia. Es un futbolista imprescindible para el Real Madrid. Devuelve el orden al equipo. Da equilibrio. Aporta variantes de juego que añoraban sus extremos. Y mejora a futbolistas como Khedira o Modric que sienten cubiertas sus espaldas. El regreso del 14 blanco ha permitido a Ancelotti encontrar al fin su equipo y un sistema en el que encajan a la perfección sus tres balas de arriba.
Nacía el partido con un latigazo de Cristiano Ronaldo al travesaño desde una banda. Sólo a él se le ocurre probar suerte. El primer gol lo hizo a pase de Benzema. Tiró mal el fuera de juego la Real y el portugués no perdonó. Habían pasado 12 minutos y del conjunto donostiarra no había noticias. Superado en todas las facetas del juego. Corriendo tras el balón.
Nada pudo hacer cuando Benzema remató de primera una jugada de equipo que inicio con Modric. El Bernabéu disfrutaba de su mejor fiesta de la temporada cuando llegó el tercero por un penalti discutido por mano de Mikel González que cortó sin intención un disparo de Cristiano directo a portería. El colegiado no lo dudó, menos aún Ronaldo, que cambió su mecánica habitual y chuto suave centrado.
Con 3-0, Khedira se atrevió a descolgarse en ataque. Participó hasta con brillantez en acciones en los últimos metros donde habitualmente se atasca. La rompió llegando desde atrás para marcar el cuarto. Nació la segunda mitad y en el momento en el que la motivación se redujo apareció la exigencia de la afición del Santiago Bernabeú. Con 4-0 comenzó el run run cuando la Real comenzó a tocar, pero no le dio para más que el gol de la honra.