VALLADOLID Mariño; Rukavina, Valiente, Rueda, Peña; Ebert, Baraja (Rubio, min. 46), Rossi, Rama (Omar, min. 66); Larsson y Guerra (Zubi, min. 87).

REAL SOCIEDAD Claudio Bravo; Carlos Martínez, Cadamuro, Mikel, De la Bella; Bergara, Zurutuza, Prieto; Griezmann (Pardo, min. 77), Vela y Seferovic (Agirretxe, min. 70).

Goles 0-1, min. 16: Griezmann. 0-2, min. 53: Griezmann. 1-2, min. 75: Larsson. 2-2, min. 78: Guerra.

Árbitro Mateu Lahoz (Comité Valenciano). Amonestó con tarjetas amarillas a Rueda, Ebert, Rossi, Rubio y Mikel.

Estadio José Zorrilla. 12.700 espectadores.

VALLADOLID. Daniel Larsson y Javi Guerra revitalizaron con sus goles a un Valladolid que parecía abatido y entregado a una Real ordenada y vertical, pero que acabó cediendo un empate ante el empuje de su rival e incluso pudo perder si Bravo no hubiera parado al final un penalti ejecutado por Ebert. Hasta ese momento, Griezmann, con dos tantos, había desequilibrado el partido ante un Valladolid que se había doblegado ante la inspiración del delantero francés y la verticalidad en las transiciones de su rival.

La Real, que presentaba la baja del defensa internacional Íñigo Martínez, buscaba su tercer triunfo consecutivo para acercarse a las plazas europeas. Con Markel Bergara como único medio centro, los donostiarras salieron con la defensa adelantada y mucho aplomo en medio campo aunque Javi Guerra marcó al filo del minuto 6 de forma ilegítima, eso sí, tras un ajustado fuera de juego.

Comenzó amenazando el Valladolid, pero fue el equipo donostiarra, a través de Griezmann, el que perforó primero la meta de Diego Mariño. Quiso reaccionar el Valladolid, con el partido metido en una dinámica de ida y vuelta, pero la verticalidad del equipo dirigido por Jagoba Arrasate, que robaba y se iba muy ágil arriba, le exponía a amenazadores contraataques.

Poco después del descanso, Griezmann aprovechó un error de Jesús Rueda para ampliar la diferencia de su equipo (0-2). Parecía que ya no podría rehacerse el Valladolid ante un rival que hasta la recta final del partido había sabido administrar su botín e incluso tuvo dos oportunidades más para llevarse los tres puntos de Zorrilla.

Sin embargo, un gol de Larsson (min. 75) evocó la remontada y, en efecto, tres minutos después, Javi Guerra equilibraba la balanza. Después se retiraría lesionado.

En medio de un final loco, activo y revolucionado, un penalti de Mikel González, a tres minutos de la conclusión, pudo darle el triunfo al Valladolid pero el chileno Claudio Bravo paró el penalti ejecutado por Patrick Ebert.