Duración 65:30 minutos.
Saques 1 de Olaizola II (tanto 13) y 2 de Bengoetxea VI (tantos 2 y 16).
Faltas de saque 1 de Bengoetxea VI.
Pelotazos 547.
Tantos en juego 11 de Olaizola II, 10 de Bengoetxea VI y 2 de Begino.
Errores 6 de Olaizola II, 2 de Untoria, 2 de Bengoetxea VI y 5 de Begino.
Marcador 0-2, 2-2, 3-2, 3-3, 4-3, 4-4, 4-6, 6-6, 6-8, 7-8, 7-9, 8-9, 8-10, 10-10, 17-10, 17-17, 17-18, 18-18, 18-21, 20-21 y 20-22.
Incidencias Partido disputado en la tarde de ayer en el frontón de la localidad navarra de Viana.
Pamplona. Oinatz Bengoetxea volvió a reivindicarse ayer en Viana como la alternativa más seria al duopolio veraniego de Aimar Olaizola y Juan Martínez de Irujo. Si el leitzarra pudo con ambos el pasado fin de semana, ayer repitió victoria ante el goizuetarra. Lo hizo en compañía de Aritz Begino, junto al que tumbó con una alta dosis de sufrimiento al goizuetarra y a Untoria (20-22) después de remontar casi en solitario un 17-10 adverso.
Capaz de ser el único delantero en entrometerse en el dominio de Aimar e Irujo en el palmarés de las ferias más importantes del verano pelotazale que está a punto de expirar (ganó La Blanca, único torneo que se les ha escapado al goizuetarra y la iberotarra) y de derrotar a ambos en estelares recientes, Oinatz Bengoetxea demostró sus credenciales para plantarles cara en San Mateo, torneo que abrochará a partir del próximo fin de semana la temporada estival manista.
No le resultó sencillo al leitzarra tumbar de nuevo al menor de los hermanos Olaizola. Y es que el goizuetarra y Álvaro Untoria, el zaguero con el que compartirá gerriko en la feria riojana, dispusieron de un renta de hasta siete tantos (17-10) que Oinatz Bengoetxea supo neutralizar con una mezcla de su talante voluntarioso con su excelsa calidad para finalizar el tanto.
Al leitzarra le costó un mundo derribar la defensa de Aimar. El goizuetarra es un francotirador para ejecutar el gancho, la parada o cualquier otra suerte de remate. Sin embargo, tiene un físico portentoso que le permite alcanzar pelotas imposibles que pueden acabar con la paciencia de cualquier rival. Pero Bengoetxea VI fue ayer constante y encontró su recompensa. Y casi en solitario, porque su reacción llegó cuando su compañero atravesaba su peor momento.
Begino, que había mantenido a raya a Untoria durante la primera mitad del encuentro, comenzó a fallar, errores que permitieron a sus rivales conseguir su máxima renta en el choque (17-10). Pero Oinatz no es un tipo que se rinda fácil. Y no lo hizo. Con su habilidad en los cuadros alegres selló un empate que se antojaba imposible (17-17). La fortuna de Begino les puso después por delante (17-18) y, más tarde, con sufrimiento, les disparó hasta el cartón 22.