El italiano Simone Ponzi, del Astana, se convirtió ayer en el primer líder de la Vuelta a Burgos, tras conquistar la primera etapa de la ronda, disputada con salida y llegada en Burgos tras 139 kilómetros, con final en el Mirador de El Castillo, de tercera categoría. Pese a lo complicado de la llegada, en alto y con tramo de adoquín, los principales nombres no quisieron ser protagonistas.