vitoria. El antiguo Manresa, ahora rebautizado como La Bruixa d'Or, se le había quedado desde hace tiempo demasiado pequeño a un personaje ambicioso como Adam Hanga. El alero húngaro, un portento físico de 1,99 metros y 24 años en plena fase de la rehabilitación de la rodilla izquierda que fue operada por Mikel Sánchez el pasado 9 de julio, necesitaba desafíos mayores antes de emprender su aventura americana al lado de Tiago Splitter en San Antonio Spurs. El Baskonia, que hará realidad su sueño de disputar por primera vez la Euroliga y con quien se ha comprometido por cuatro campañas con cláusulas de salida al final de cada una de ellas, colma todas sus expectativas profesionales y así se encargó de ponderarlo durante su presentación oficial en el Fernando Buesa Arena como una de las tres caras nuevas junto a Walter Hodge y Lamont Hamilton.
"Desde el primer momento, estaba interesado en venir aquí. Es un gran club con una gran organización. Me ayudará a labrarme una buena imagen y tendré la oportunidad de ser un jugador mejor. Si quiero algún día dar el salto a la NBA, éste es el mejor sitio para estar", confesó Hanga, acompañado de sus inseparables muletas en estas primeras semanas del largo post-operatorio.
Internacional por Hungría, aunque de padre ecuatoguineano, el flamante fichaje azulgrana aterriza en la capital alavesa avalado por dos notables temporadas en la comarca del Bagés. En esta última, promedió 12 puntos y 4 rebotes erigiéndose en el termómetro de un modesto equipo condenado irremediablemente a la hoguera de un descenso que, a la postre, no se ha visto consumado en los despachos. El Manresa le reclutó hace dos veranos cuando era un auténtico desconocido en el Albacomp de su país natal. Durante esta reciente etapa a las órdenes de Jaume Ponsarnau, sus prodigiosos vuelos, sus mates -los tableros de la ACB ya han temblado en más de una ocasión- y sus tapones han hecho las delicias del Nou Congost.
Si Fernando San Emeterio hace finalmente las maletas, un deseo que permanece inalterable por parte de los rectores, se halla predestinado a conformar una pareja explosiva junto a Andrés Nocioni que proporcionará al Baskonia ingentes dosis de fortaleza física, músculo y agresividad en el puesto de tres alto, una especie en extinción hoy en día dentro del baloncesto. Todos los estamentos del club alavés tienen claro que no es una estrella desequilibrante, pero sí un interesante complemento que en plena madurez deportiva debe oxigenar al incombustible santafesino siempre que este no sea reciclado al puesto de cuatro.
la nba, a medio-largo plazo Hanga, que lucirá el dorsal 8 en su camiseta, calificó como "una enorme oportunidad" su desembarco en la entidad vitoriana. Su salto a los Spurs, que le escogieron en primera ronda del draft de 2011, constituye un objetivo todavía lejano, aunque lógicamente no descarta que esta experiencia le sirva "como trampolín" para recalar en el vigente subcampeón de la NBA con la personalidad más formada. A corto plazo, ya arde en deseos de debutar en la Euroliga. "Todavía es pronto para hablar de cruzar el charco. Es la primera que voy a disputarla. Voy a dar un paso adelante en mi carrera, me enfrentaré a los mejores equipos y, por ello, debo demostrar que soy un jugador de alto nivel. Algún día quiero ir a Estados Unidos, pero mi futuro es ahora el Baskonia", confesó.
Consciente de que procede de un conjunto modesto como el manresano donde la exigencia era sensiblemente menor, el de Budapest siente que su aclimatación al Baskonia será compleja y aboga por "ir paso a paso" para no ser una figura testimonial en el engranaje de Scariolo. "Seguro que viviré una gran experiencia jugando dos encuentros a la semana. Hasta ahora, sólo tenía uno y esto será algo nuevo para mí. No me quedará otro remedio que acostumbrar a ello, aunque supongo que al principio será complicado. Escogí el Baskonia precisamente para poder convertirme en un mejor jugador", insistió rotundo Hanga, quien ha recabado opiniones positivas de su nuevo punto de destino gracias a un viejo conocido como Kornel David.
Dado que únicamente ha cumplido tres de las diez semanas previstas por los médicos para dejar atrás su delicada operación de rodilla y todavía le aguarda un largo camino antes de disputar sus primeros minutos como baskonista, previsiblemente en la Supercopa, la única prioridad de Hanga reside ahora mismo en concretar una rehabilitación satisfactoria. "Hablé ayer -por el miércoles- con Sergio Scariolo, pero en ningún momento no sobre mi rol en el equipo. Eso no es lo importante ahora. Primero, debo recuperarme bien, estar sano y luego ya se verá lo que puedo aportar. Además, el equipo no está aún confeccionado del todo. No dudo, en cambio, de que encontraré mi sitio aquí", alertó para concluir.