barcelona. La selección española femenina de waterpolo afronta hoy contra Hungría (21:45) el último escollo antes de obtener el pase a la final soñada de los Mundiales de Barcelona, ante un rival duro que, según las jugadoras y el equipo técnico, será muy complicado de doblegar.

Las guerreras españolas llegan a la semifinal con la moral por las nubes después de ganar por 9 a 6 en los cuartos de final a Estados Unidos, vigente campeona olímpica, en un partido en el que se quitaron la espina clavada de la final que perdieron el pasado verano en Londres.

Pese a la alegría que significó la victoria ante las estadounidenses, las jugadoras de Miki Oca no aceptan el papel de favoritas y se muestran cautelosas con Hungría, un rival que este año se les ha atragantado en los dos encuentros que han disputado en la Liga Mundial de la FINA.

"Es un equipo bastante joven. Han cambiado muchas jugadoras. Están muy fuertes. Están jugando muy bien. En los dos partidos que jugamos este año nos ganaron, pero esto es un mundial nuevo, todos los equipos empiezan de cero", señaló Laura López.

En este sentido, el seleccionador Miki Oca asegura que las húngaras tienen "un equipazo" y que deberán preparar "muy bien el encuentro" para conseguir el objetivo de disputar la que sería su primera final en unos Mundiales.

"Tienen un equipo muy completo y sobre todo son muy agresivas. Si los árbitros les permiten un poco más de la cuenta será muy complicado jugar, pero estamos preparadas para su juego, las conocemos de sobras y debemos ir a muerte", advirtió Jenifer Pareja.

"Hungría está haciendo un juego muy bueno, tienen muy buen equipo y hay que seguir adelante porque queremos llegar a la final", añadió la jugadora catalana.

En los dos partidos que ambas selecciones han disputado este año, las húngaras han conseguido vencer a las españolas por 12 a 9 y 13 a 11. Por ello, Mati Ortiz cree que será un partido trampa en el que las anfitrionas deben hacer "todo lo posible" para ganar y pasar a la final.

"Será un equipo muy complicado porque Hungría es muy física. Nadan muy rápido, luchan, están todo el rato encima de las atacantes, pero se tiene que jugar, se tiene que ganar y hacer las cosas bien", aseveró Ortiz.

Los chicos caen Por su parte, al filo de la medianoche el equipo español masculino no pudo superar a Italia en su cita de cuartos.

Pese a plantar cara durante todo el partido, la roja no pudo superar a su rival, que acabó imponiéndose por un gol: 3-4.